En diálogo con el sitio digital de Mar del Plata 0223.com expresó sus coincidencias con los intendentes electos, Germán Di Cesare y Facundo López. Luego de unas Paso que tenían a UNA más lejos que cerca del poder Ejecutivo, el massismo se recuperó y se llevó dos triunfos rutilantes.
Sobre lo acontecido en Necochea, el senador le llegó a pedir a Pablo Aued, el candidato del frente Cambiemos, que admitiera definitivamente la victoria de López, algo que terminó por ocurrir horas después.
“No reconocer su triunfo es retroceder en el tiempo. Ser gente de bien es aceptar esa victoria, producto de mucho esfuerzo. Pablo lo debería avalar”, expresaba Hogan.
Confirmado el nuevo gobierno en manos de UNA, el legislador concluyó: “El municipio se encuentra muy venido abajo y ahora Facundo vivirá una situación similar a la que tuvimos nosotros en Miramar en 2003. Lo veo muy identificado y listo para que Necochea explote todo su potencial”.
“En sólo dos años desde su creación, el movimiento se ha consolidado. Seremos el espacio opositor más fuerte. Fuimos tan solo ocho intendentes los que nos separamos del Frente para la Victoria cuando Cristina Fernández dijo que quería ir por la reelección. Y luego muchos otros confiaron en Sergio Massa”, rememoró el legislador.
En la previa de lo que sucederá el 22 de noviembre y atento a la elección que tomará el electorado que votó por el candidato presidencial de UNA, Hogan no anduvo con vueltas y prefirió evitar posturas públicas a favor o en contra de Scioli y Macri. “No podemos faltarle el respeto a las más de 5 millones de personas que eligieron a Massa, el voto es libre”, razonó.
“Aquel que respete la agenda de trabajo que propuso Massa, aquel que se anime a luchar definitivamente contra el narcotráfico y la corrupción, no solamente a anunciar esas luchas, si no a decir como las va a llevar adelante, será seguramente el que tenga la posibilidad de mejorar las cosas”, amplió Hogan, quien fue reelecto intendente de General Alvarado y de inmediato pasó a ocupar una banca en la Cámara de Senadores provincial desde diciembre del 2013.
Con la consolidación como tercera fuerza, la postura del massismo que sí ha quedado clara -al menos públicamente-, será la de transformarse en una oposición constructiva: “De ninguna manera vamos a poner palos en la rueda. En Senadores no habrá mayoría de ninguna de las fuerzas, nosotros queremos acompañar a Vidal y poner en la mira lo que veamos que está mal”, anticipó.
