Tras el incendio de la tumba del patriarca José en Nablus, esta jornada de movilización convocada por varias facciones palestinas ha desembocado en graves enfrentamientos con el Ejército israelí que han provocado un muerto.
Pero no sólo en Cisjordania sino también en Gaza dónde al menos tres palestinos han fallecido y 57 han resultado heridos de diversa consideración. El movimiento islamista Hamás, que controla la Franja, ha hecho un llamamiento para que las protestas continúen.
El ataque a la tumba de José, uno de los santuarios judíos en Cisjordania, ha provocado importantes daños materiales. El presidente palestino, Mahmud Abás, ha formado una comisión de investigación para esclarecer unos hechos que ha calificado de “deplorables”. También el Ejército israelí ha tomado medidas para identificar y detener a los autores.
Belén, Nablus, Jenin, también Hebrón. En esta ciudad ha muerto otro palestino que vestido con un chaleco florescente de periodista ha acuchillado a un soldado israelí antes de caer abatido. Inmediatamente las fuerzas de seguridad han empezado a dispersar a los periodistas que estaban en la zona con material antidisturbios.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas analiza la situación en una reunión extraordinaria.