Profesionales de Francia brindaron una serie de conferencias y analizaron la importancia de la carne de oveja con pares argentinos.
Investigadores del Institut National de la Recherche Agronomique (INRA) de Francia visitaron la Estación Experimental Agropecuaria (EEA) del INTA Balcarce, ocasión en la que aprovecharon para analizar la importancia de la carne de oveja y propiedades de prevención de cáncer.
La delegación estuvo compuesta por los doctores Dominique Bauchart y Denis Durand que trabajan en el centro experimental de Clermont-Theix. La actividad de ambos en la ciudad serrana consistió en el dictado de cuatro conferencias científico-técnicas con discusiones sobre las líneas de investigación que se llevan a cabo en el Grupo Nutrición y Calidad de Producto sobre la temática calidad de carnes y efectos benéficos sobre la salud humana.
Asimismo, intervinieron en un intercambio de conocimientos con técnicos de la EEA Anguil, del Instituto de Tecnología de Alimentos (ITA) del INTA Castelar y de la Fauba, con quienes se analizaron posibles líneas de investigación a seguir en un futuro cercano.
En este marco, LA CAPITAL les consultó a los visitantes las razones por las cuáles eligieron visitar el INTA y en particular, la EEA de Balcarce.
Bauchart expresó el interés en compartir investigaciones sobre la calidad de la carne bovina reconociendo que el Grupo de Nutrición del INTA trabaja activamente en líneas asociadas al mejoramiento del valor saludable de los lácteos y de las carnes.
El conocimiento surge a partir de los trabajos previos del ingeniero local Gerardo Gagliostro, quién realizó su tesis de doctorado y especializaciones posteriores sobre el tema en el INRA.
Buen producto alimenticio
Los franceses manifestaron las razones por las cuales habían llegado a la conclusión en su investigación de que la carne es un buen producto alimenticio.
Al respecto, Durand aseguró que «en los trabajos que estamos realizando en Francia se empezó a complementar los estudios zootécnicos que se hacen sobre los animales, con estudios que involucran la salud del ser humano que consume esos productos cárnicos.
«Basados en los datos de estas investigaciones podemos afirmar que la carne bovina, desde el punto de vista de nutrición proteica, no solamente es buena por su excelente balance de aminoácidos esenciales, sino por criterios relacionados con la absorción rápida de esos aminoácidos lo que implica un estímulo a la recuperación de tejido muscular en el ser humano. Esto es particularmente importante en personas adultas».
Del mismo modo, entendió que «el consumo de carne bovina sería muy aconsejable en personas de edad avanzada, contrariamente a lo que se piensa, porque, además de fuente de proteínas y minerales, es excelente para aportar vitaminas del complejo B y en particular de vitamina B-12. Esto justifica su consumo».
El doctor Bauchart agregó que desde el punto de vista de los lípidos, «recientes investigaciones demuestran que los ácidos grasos denominados Trans, entre ellos el ácido linoleico conjugado (CLA), tienen propiedades protectoras contra lesiones cardiovasculares. También nuestros trabajos han puesto en evidencia efectos protectores promisorios sobre distintos tipos de cáncer en el ser humano».
Según estos investigadores, si el consumo de carne bovina es adecuado y parte de una dieta balanceada, acompañada de legumbres, frutas y verduras, «las carnes tienen propiedades anticancerígenas y antiaterogénicas», remarcaron.
El ingeniero Gerardo Galiostro, acompañando a los visitantes, indicó que «en Balcarce se trabaja en el área carnes y lácteos para, a través de la alimentación de los animales, poder amplificar la concentración de las moléculas benéficas a las que hicieron referencia nuestros colegas franceses, siempre respetando la condición de alimentación base pastoril».
El profesional local puntualizó que se utiliza en la investigación suplementación con oleaginosas que contienen ácidos grasos insaturados que luego el animal rumiante transforma en ácidos grasos Trans que son benéficos para la prevención del cáncer y los problemas cardiovasculares.
Para finalizar, refirió que también se estudian otras moléculas antioxidantes que protegen de la generación de radicales libres en el organismo que son responsables de la aparición de ciertas enfermedades en el ser humano. (LA CAPITAL DE MAR DEL PLATA)
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