Por Carlos Pagni
La interna del PJ ha estallado. El comportamiento de Néstor Kirchner en el conflicto con el campo se ha vuelto incomprensible para franjas cada vez más amplias de la dirigencia peronista. En una primera etapa, la dificultad para entender la estrategia oficial alimentó la tímida disidencia de gobernadores e intendentes. Contorsiones para evitar los costos de una política impopular, sobre todo allí donde el PJ se asienta en el voto rural.