Foto ilustrativa de Carlos Guillot
En horas de la tarde del 1º de enero, se incendió un sector del Parque Miguel Lillo, el mismo en el que meses antes se había producido el desmonte de varias hectáreas. El incendio no revistió ningún peligro para las instalaciones que se encuentran en el área.
Con la participación de 7 dotaciones (5 de Necochea, 1 de Quequén y 1 de Prefectura), los bomberos trabajaron hasta las 22.30 para circunscribir el fuego. Quedó en el lugar una «guardia de cenizas», para evitar un posible reinicio del fuego.
Con la asistencia de Defensa Civil de la Municipalidad de Necochea y la Dirección de Seguridad Pública se pudo contener rápidamente el siniestro utilizando además máquinas municipales para efectuar los corta fuego necesarios.
El siniestro fue menos importante de lo que las densas nubes de humo que se veían desde varios sectores de la ciudad podían hacer imaginar, según manifestaron los oficiales de bomberos que participaron en el trabajo.
No se conoce aún las causas que originaron el fuego, aunque debemos recordar que ese sector de la ciudad , y más en esta época del año, es el más vulnerable. Aumenta el riesgo las pocas precipitaciones pluviales que se han registrado en los últimos meses.