Se desarrolló la segunda jornada de audiencia en el jury que se le sigue a la jueza de Necochea Marta Raggio – actualmente suspendida en sus funciones y sometida a juicio por presunto acoso laboral y sexual.
Durante la jornada que se desarrolló hoy se presentaron al menos 6 testigos que en general dejaron en evidencia el presunto accionar de la destituida magistrada mientras se desempeñaba como titular del juzgado en lo Correccional Nº 1 de Necochea.
Los testigos que desfilaron ayer por el tribunal pusieron de manifiesto que Raggio aparentemente tenía como constante insultar a los trabajadores, descalificar su trabajo, cambiarles de lugar de tareas, aplicar el aislamiento como castigo, ridiculizarlos, intromisión en la vida privada y discriminación.
Una de las testigos fue la doctora María Verónica Martínez, que se desempeñó como secretaria del juzgado durante el periodo 2004/2005 y en su relato, avergonzada y al borde de las lágrimas señaló «yo estaba saliendo con un chico de Necochea y un día durante una audiencia delante del tribunal, otros colegas y mis compañeros de trabajo, me dijo: «ya te queres ir, estas pensando en la pija» (sic).
En otro pasaje de su declaración señaló que el primer requisito que le exigió es que no aceptaba embarazos – me dijo «no vas a venir preñada a trabajar», entre lágrimas martínez dijo «aguante todo eso porque necesitaba el trabajo, hasta que un día me cansé de ser humillada y renuncié».
En tanto mañana está previsto que declaren testigos de la defensa de la mujer y otros tres de interés para la procuración y en base al tiempo que demoren esos testimonios mañana o el viernes será el turno de que comparezcan peritos psiquiátricos y médicos.
Los testimonios de los profesionales son clave para determinar si Raggio es destituida -como pretende ella y su defensa- por inhabilidad física y mental o por abuso laboral y sexual.
Si se da la primera situación, y es destituida por razones de salud no hay posibilidades de que prospere una causa penal de lo contrario puede ser además de destituida y luego juzgada penalmente.
Ayer, Raggio requirió que no siga el jury y denunció «grave violación a los derechos humanos y crueldad del juzgamiento». La magistrada basó este pedido en un consejo de sus médicos para que no se presente al juicio porque «una situación de stress y nerviosismo puede acarrearle graves complicaciones».
No se hizo lugar a su reclamo y el juicio continuó sin su presencia, presidido por el titular de la Suprema Corte, Hitters, e integrado por los conjueces abogados Horacio Garagusso, Javier Luis Octavio Carbone, Eduardo G.A. López Wesselhoefft, Norberto José Sánchez y Ricardo Jesús Cornaglia. También lo componen los legisladores Marcelo Feliú, Raúl Pérez, Diego Rodrigo, Carlos Bonicatto y Alberto Delgado. (DIB)