Cierre Definitivo del Aquarium de Mar del Plata: Inicia el Traslado de los Animales.
Tras 32 años de recibir a millones de visitantes, el Aquarium de Mar del Plata cerró oficialmente sus puertas el pasado 31 de marzo, dando paso a las tareas de desmonte y reubicación de los animales que albergaba.
El emblemático parque marino, conocido por sus shows de delfines, belugas y lobos marinos, así como por la posibilidad de bucear con estos mamíferos, se convierte así en un recuerdo para la ciudad y el país.
El proceso de desmantelamiento ya ha comenzado, y una de las primeras acciones visibles fue el inicio del desmontaje de la icónica estructura de tres delfines que adornaba la entrada del Oceanario. Según se informó, esta pieza será trasladada al Bioparque Batán para su exhibición.
Desde la empresa administradora del parque acuático, se comunicó que los delfines nacidos en cautiverio, junto a sus padres originarios del Caribe, serán reubicados en un oceanario de esa región perteneciente al mismo grupo empresarial.
El destino del resto de los animales, que incluían flamencos, pingüinos, tortugas, faisanes, guacamayos y lémures, también será su traslado a otras instalaciones del grupo.
Una noticia positiva en este proceso es la liberación de la tortuga marina “Jorge”. Tras completar su ciclo de rehabilitación y adaptación, el ejemplar será reintegrado a su hábitat natural.
El anuncio del cierre del Aquarium ha generado diversas reacciones, especialmente por parte de agrupaciones animalistas. La organización Activistas Animalistas de La Costa, junto con miembros de la campaña mundial Empty the Tanks, han llevado a cabo movilizaciones y acciones exigiendo la libertad de los animales en cautiverio y solicitando información detallada sobre el destino de cada uno de los ejemplares.
Estas agrupaciones mantienen su preocupación por el bienestar de los animales durante el proceso de traslado y en sus nuevos destinos.
Con el inicio del desmonte y la reubicación de los animales, se cierra un capítulo en la historia del entretenimiento marino en Argentina, dejando tras de sí un debate sobre la tenencia de fauna en cautiverio y el futuro de los animales que formaron parte de la experiencia del Aquarium de Mar del Plata durante más de tres décadas.
