La noche del 6 de diciembre de 2014, Michel Noa Suárez, de 20 años, fue hallado colgado de un cordón de la malla en el locutorio de la Comisaría Segunda donde se encontraba alojado tras haber sido detenido horas antes, según los testimonios de los policías que prestaban servicio en la dependencia.
Cuatro de esos efectivos fueron pasados a disponibilidad y hoy enfrentan un juicio por “Homicidio culposo y severidades” y “torturas seguidas de muerte”.