Los precios de los alimentos se incrementaron 3,5 veces del campo a la góndola en junio. Esto significa que, en promedio, el productor recibió $1 cada $3,5 que pagó un consumidor.
Sin embargo, el análisis hecho por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) arroja resultados muy dispares entre los distintos bienes que analiza mensualmente.
Por ejemplo, el limón fue el que mayor diferencia de precios presentó entre su origen (el campo) y su destino (la góndola).
Su valor se multiplicó 12,1 veces ya que al productor le pagaron $19,8 el kilo y el consumidor final pagó $238,1 por la misma cantidad. Esto implica que los productores de limón participan en apenas el 8,3% del valor final.
En el otro extremo del ranking se ubicó el huevo que tuvo una participación del 50,5% del precio de góndola de los productores. La brecha de precios fue de $411,7 en origen contra $816 en destino.
El informe indicó que «por tercer mes consecutivo, el limón fue el alimento con mayor brecha entre el productor y el consumidor», detallando que «sus precios aumentaron 6,3% en origen y disminuyeron 10% en destino. Es decir, a pesar de que la diferencia campo-góndola continúa en descenso (de 14,8 veces en mayo a 12,1 en junio), sigue siendo el producto con mayor disparidad».
El IPOD frutihortícola, compuesto por los precios de 19 frutas y hortalizas, se multiplicó 5,1 veces en junio. El IPOD ganadero, conformado por 5 productos y subproductos ganaderos, se incrementó 3 veces más lo que pagó el consumidor frente a lo que recibió el productor durante el sexto mes del año.
En términos generales, estos números muestran cierta estabilidad entre junio y mayo ya que el índice IPOD también había sido de 3,5. Asimismo, se ve una caída en la brecha si se compara con los meses anteriores: en abril había sido de 3,9.
