Lo dijo este jueves por la noche durante un encuentro de líderes de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) impulsado por la presidencia pro témpore a cargo de la Argentina, celebrado en Buenos Aires.
El presidente de México, Andrés López Obrador, afirmó este jueves que “sería excepcional lograr la integración de toda América” y agregó que las intervenciones y los golpes de Estado “son una política obsoleta”.
“Es necesario pensar mucho en la necesidad de continuar insistiendo en la unidad de nuestros pueblos, de nuestros países, sin rechazar la universalidad”, sostuvo López Obrador en un mensaje grabado emitido durante el encuentro.
“Creo que lo explicaba muy bien José Martí en su texto Nuestra América donde decía, palabras más, palabras menos, debemos injertar al mundo en nuestros pueblos de América pero el tronco tiene que seguir siendo el nuestro”, agregó.
En este sentido, remarcó la necesidad de “no perder nuestra identidad, nuestra idiosincrasia, lo que somos” pero también pidió “no descartar la posibilidad de una integración de todo el continente”, aunque reconoció que se trata de un objetivo “más complejo”.
López Obrador recordó que México tiene un acuerdo económico con Estados Unidos -con quien tiene una “vecindad de 3.180 km” y donde hay más de 40 millones de mexicanos- y Canadá, que les permitió lograr “buenos resultados”.
El mandatario dijo que esa integración de América del Norte puede ampliarse: “Sería excepcional lograr la integración de toda América”.
El mexicano comparó su propuesta con la Unión Europea que surgió como una comunidad y luego “se consolidó”. “¿Por qué no algo así en toda América?”, se preguntó.
Sin embargo, remarcó que es necesario “convencer a los gobernantes de Canadá y Estados Unidos” que las intervenciones y los golpes de Estado son “una política obsoleta”.
Finalmente, expresó su aprecio por el presidente argentino Alberto Fernández, a quien definió como “hombre de buen corazón”, a la vez que le deseó “lo mejor en la próxima contienda” electoral al expresidente brasileño Luiz Inácio “Lula” da Silva, que “va a ser una bendición del pueblo de Brasil”.