La nueva variante del coronavirus de Sudáfrica, Omicron, llega a Europa con un aumento de los contagios, debido a que es de transmisión más fácil, y podría traspasar el escudo de las vacunas, obligando a las autoridades sanitarias a tomar restricciones inmediatas.
En Bélgica se detectó el primer caso, mientras que Israel también tiene uno. Es «preocupante», advirtió la Organización Mundial de la Salud (OMS). «Da miedo», dijo la presidenta de la Comisión de la UE, Ursula von der Leyen.
Frente a esta situación el Viejo Continente prueba con blindarse impidiendo los vuelos provenientes del sur de África.
Ómicron también asusta a los mercados financieros mundiales.
En Europa, una caída del 3,7% en el índice Stoxx 600 que agrupa a las principales títulos que cotizan: una caída que equivale a aproximadamente 390.000 millones de capitalización ‘quemada’ en una sola sesión. Wall Street cerró con el peor «viernes negro» de la historia.
El nombre técnico de Omicron es B.1.1.529; fue informado por primera vez por la OMS en Sudáfrica el 24 de noviembre y «tiene un gran número de mutaciones, algunas de las cuales son preocupantes», informó el grupo de expertos de la Organización Mundial de la Salud encargado de monitorear la evolución de la pandemia.
La novedad también es seguida de cerca por el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC), según el cual podría estar asociada a una muy alta transmisibilidad y un debilitamiento de la acción de las vacunas, pero no a una infección más grave.
Para el Instituto Nacional Sudafricano de Enfermedades Transmisibles, «es probable que se evite parcialmente la respuesta inmunitaria, pero es igualmente probable que las vacunas sigan ofreciendo altos niveles de protección contra la hospitalización y la muerte».
Por ahora, la información sobre Ómicron es preliminar, pero es suficiente para dar la alarma en todo el mundo. «Sabemos -dijo Ursula von der Leyen- que las mutaciones se pueden propagar en todo el mundo en pocos meses.
Es importante que Europa se mueva rápidamente y de modo compacto. Propuse a los Estados miembros activar el freno de emergencia para limitar la difusión de la nueva variante con la suspensión de todos los vuelos desde el sur de África hasta que tengamos una clara comprensión de la gravedad de la variante».
Detener, por tanto, las conexiones de los 27 estados de la UE con siete países: Botswana, Swazilandia, Lesotho, Mozambique, Namibia (en este país solo el 11,6% de la población está vacunada y 230 mil vacunas podrían destruirse porque están caducando), Sudáfrica, Zimbabwe.
Con una circular del ministro de Salud italiano, Roberto Speranza, Italia ya había ordenado el bloqueo por la mañana y Estados Unidos también está considerando una decisión similar.
Los jugadores y el personal de Zebre Rugby, un equipo con sede en Parma que participó en un torneo, están encerrados en un hotel en Ciudad del Cabo.
En Bélgica el caso de la variante involucró a una mujer joven que desarrolló síntomas 11 días después de viajar a Egipto a través de Turquía.
No tuvo ninguna conexión con Sudáfrica ni con ningún otro país del sur del continente africano. La paciente presentaba una carga viral elevada en el momento del diagnóstico. No estaba vacunada ni se había infectado en el pasado. El país optó por un nuevo endurecimiento con el cierre de restaurantes a las 11 de la noche y un alto a las discotecas.
Más severa son las medidas adoptadas por los vecinos holandeses: «a partir del domingo, Holanda estará efectivamente cerrada entre las 17 y las 5» de la mañana, anunció el primer ministro, Mark Rutte.
Sobre la eficacia de las vacunas contra Omicron habrá que esperar los estudios activados. Pfizer espera tener los primeros resultados dentro de dos semanas y de todos modos, aseguró la empresa, «en caso de que surja una variante del virus SasrCoV2 que escape a la vacuna, Pfizer y BioNTech prevén estar en grado de desarrollar y fabricar una vacuna a medida contra esa variante en aproximadamente 100 días, previa aprobación regulatoria».
Y las acciones de Pfizer y Moderna dieron hoy un salto en el mercado de valores. Mientras que Stefano Fassina (LeU) y Giulia Grillo (M5S) piden la suspensión de las patentes.
Italia también está monitoreando la nueva variante: el Spallanzani de Roma estableció un grupo de trabajo especial. El presidente del Instituto Superior de Salud, Silvio Brusaferro, explicó que «la Delta es la que circula hoy en nuestro país de manera casi exclusiva, mientras que para la variante Delta plus los números son bastante limitados. A la fecha, las secuencias de la variante aislada en Sudáfrica no figura en la base de datos nacional». (ANSA).