En el Gobierno prevalece por estas horas la idea de cumplir con el plazo de nueve días y retomar la apertura condicionada que estaba vigente hasta el último decreto de Alberto, para en todo caso regresar a la cuarentena dura en dos semanas..
Como reveló LPO, especialistas y ministros de Salud de las provincias reconocen que había que seguir al menos una semana más con la cuarentena dura, porque los casos siguen altos y las camas en las terapias intensivas al límite.
Sin embargo, la resistencia y el enojo de la gente con el confinamiento, hace que impere la idea que no hay «respaldo social» para extender la cuerentena dura.
Entonces, por estas horas, prevalece la idea de regresar al régimen sanitario previo a la cuarentena dura -restaurantes y bares sólo afuera y todo cierra a las ocho de la noche- ante el enojo social. Este domingo, por ejemplo, el tucumano Juan Manzur fue escrachado en su casa por un grupo de gastronómicos que sufre el cierre de su actividad.