El asunto de los supuestos ‘ataques sonoros’ contra la Embajada de Estados Unidos en La Habana estuvo cerca de llegar a mayores.
Se evacuó al personal no imprescindible y a sus familias y se apuntaba veladamente al régimen de Raúl Castro como el responsable.
Ahora un estudio ha examinado grabaciones realizadas por el personal de la embajada y publicadas por la agencia Associated Press y los investigadores han concluido que el espectro sonoro coincide con el ruido que emite el Anurogryllus celerinictus, un grillo autóctono conocido como «grillo de cola corta de las Indias».
Lo único que puedo decir, de manera bastante definitiva, es que la grabación es de un grillo, y creemos que sabemos de qué especie es», según ha declarado a The New York Times, Alexander Stubbs, de la Universidad de California en Berkeley.
Precisan que la coincidencia se produce cuando se emite el sonido del grillo en una habitación cerrada, por efecto del eco.
«El sonido coincide en duración, pulso y ritmo de repeticiones, espectro de potencia estabilidad y oscilaciones» dice el sumario del estudio_, que también advierte en cambio que los problemas de salud descritos por los diplomáticos no forman parte del objeto del estudio «nuestras conclusiones destacan la necesidad de una investigación más rigurosa sobre la fuente de estas dolencias»_ dicen, sin descartar problemas psicosomáticos y otras causas fisiológicas no relacionadas con los famosos «ataques sonoros».
Análisis de la intensidad del espectrowww.biorxiv.org
Las víctimas denunciaban sufrir dolores de cabeza, problemas cognitivos, insomnio y pérdida de audición por el agudísimo sonido, que achacaron a un ataque.
Los familiares de los diplomáticos canadienses también abandonaron la isla mientras se investigaba la causa de los misteriosos problemas que afectaban a quienes se veían expuestos al molesto sonido, aunque Canadá juzgaba «poco probable» la hiopótesis del «ataque sónico».
El Gobierno cubano rechazó en numerosas ocasiones su implicación y el FBI también dijo no tener ninguna constancia de que se hubiera producido ataque alguno.
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