En el proyecto que mandó la Provincia a la Legislatura bonaerense el plan de obras públicas representa el 6% del Presupuesto y suma esta vez un impuesto a las tragamonedas y el juego online. Cuál es el nivel de endeudamiento previsto.
El Gobierno bonaerense presentó este lunes el proyecto de Presupuesto 2019, que prevé un total de gastos proyectados de 929.000 millones de pesos, mientras que los ingresos totales previstos ascienden a 889.000 millones.
El foco principal estará en el plan de obras públicas, que continúa representando el 6% del presupuesto, y en la inversión social, calculada en 7 de cada 10 pesos del presupuesto.
Según se indicó a este medio, el proyecto presentado a última hora de este lunes “tiene coherencia” con los tres presupuestos presentados por el gobierno de María Eugenia Vidal, manteniendo como prioridades el impulso de la obra pública, el fortalecimiento de la inversión social y las mejoras en seguridad.
Las autoridades aseguran en ese sentido que la premisa ha sido “acompañar a los más vulnerables” en un año más difícil de lo esperado. “La Provincia debe ser un amortiguador y no un propalador de la crisis”, expresó una fuente consultada, que sostuvo que este año bajaron los impuestos a razón de 15 mil millones en Ingresos Brutos; mil millones en sellos y 3.000 millones en concepto de la eliminación de impuestos a los servicios, que dispuso en abril pasado. Todo eso suma 19.000 millones en concepto de transferencias del Estado para aliviar la carga tributaria.
Las autoridades aseguran que durante este año difícil se tomó la decisión de “mantener todas las obras en marcha”, y al respecto aclaran que “no iniciamos obras que no vayamos a terminar. No hay ninguna obra trabada”, y en el mismo sentido se precisó que se mantuvieron regularizados los pagos a proveedores y municipios, de modo tal de “generar previsibilidad”.
Asimismo, la provincia no tomó deudas a tasas altas. La última contraída fue en abril, a 3,75%, “la menor desde 2012”, aclaró una fuente consultada.
Entre las medidas adoptadas a lo largo del presente año se destaca la incorporación de programas sociales y el aumento de la jubilación mínima. Y, por último, destacaron las medidas anunciadas la semana pasada para favorecer a las pymes.
Esta serie de disposiciones llevadas adelante durante 2018 tuvieron por objeto “amortiguar el impacto de la crisis. “Fuimos preventivos y no reactivos”, aclaró un funcionario del gabinete de Vidal.
Ese funcionario precisó que por tercer año la provincia tuvo “superávit operativo”, y eso también sucederá en 2019, calculándose ese superávit operativo en 12.000 mil millones de pesos, que representan el 0,2% del Producto Bruto provincial. Este año el superávit operativo ascenderá a 8.000 millones de pesos.
El presupuesto 2019 contempla la transferencia de subsidios de servicios públicos del Gobierno nacional, con lo cual el déficit de este año será de 40.000 millones de pesos (sin las transferencias de los servicios sería de solo 12 mil millones) y se mantiene en 0,6% del producto, un porcentaje muy similar al de los años 2018 y 2017.
“Si no hubiera obras, no habría déficit”, sintetizó una fuente consultada, que precisó que los gastos que implican las transferencias de servicios, más la eliminación del Fondo Sojero, impactan en el orden de los 40.000 millones de pesos. La compensación oficial es de 12.000 millones de pesos.
¿Está previsto un aumento en las tarifas de transporte y electricidad que ahora pasan a depender de la provincia? El presupuesto no da precisiones en ese sentido, pero las fuentes consultadas aclararon que las subas no serán muy distintas a las previsiones inflacionarias.
En cuanto a la deuda, para el próximo año se prevé un endeudamiento en los mercados de crédito de 68.500 millones de pesos.
Las autoridades presentan esa cifra como “el pedido de deuda más bajo de esta gestión”. Recordemos que, en 2016, fue de 2,13%, en 2017 fue 1,43%, en 2018 fue 1,24% y en 2019 será 1,06% del producto.
Esa deuda que tomará la provincia será para pagar los vencimientos de deuda, lo que implica que no hay deuda nueva prevista.
Con relación a los impuestos, en línea con el Consenso Fiscal, la provincia continuará disminuyendo impuestos distorsivos que perjudican la actividad económica y la generación de impuestos.
Es así que se bajarán las alícuotas de ingresos públicos del siguiente modo: para la producción primaria, de 1,5 a 0,75%; para la construcción, de 3 a 2,5%; para los servicios, de 5 a 4,5%; y para el transporte, de 3 a 2%; para las comunicaciones, de 5 a 4%; para servicios inmobiliarios, de 6 a 5%, y para la electricidad, gas y agua, de 4 a 3,75%. Esta disminución significa una transferencia del sector público al privado productivo de 10.000 millones de pesos.
En cuanto al valor fiscal de los inmuebles, el proyecto oficial prevé un aumento del 38% del impuesto inmobiliario urbano y rural. En el caso del impuesto rural, se aclaró que en gran medida este aumento se compensa con la reducción de ingresos brutos a ese sector.
Según confiaron fuentes consultadas, el aumento impositivo redunda en que 3 de cada 4 viviendas (el 76% de los bonaerenses) pagarán 63 pesos más en promedio, y como máximo abonarán 99 pesos más.
Impuesto al juego
Respecto al juego, además del aumento que ya se había hecho sobre ingresos brutos (se pasó del 12% al 15%), este año la provincia suma un impuesto del 2% para los premios de máquinas tragamonedas, con lo cual se piensa recaudar 6.000 millones de pesos que serán destinados a un Fondo de Integración Social, para salud, educación y desarrollo social.
Asimismo, comenzarán a controlar el juego online, que hasta ahora funcionaba sin regulaciones por parte del Estado. En este ítem se esperan recaudar 1.100 millones de pesos.
El Fondo del Conurbano
Mucho se habló en los últimos días respecto de un acuerdo entre Provincia y la Nación para que esta última restituya 19.000 millones de pesos como compensación.
Según pudo saber parlamentario.com, el tema no está definido, aunque sí ha sido hablado con Marcos Peña y el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, previéndose que la Provincia podrá contar con ese dinero, en el transcurso del próximo año, pero resta establecer “cómo y en qué momento”.
¿De dónde surgen esos 19.000 millones de pesos? Es el valor del ajuste, precisó una fuente consultada, que detalló que el Fondo del Conurbano se compone de 21.000 millones de pesos en concepto de coparticipación que sí son ajustables por inflación y se transforman en unos 26.000 millones, más 44.000 millones que actualizados representarían 63.000 millones de pesos. Los 19.000 millones surgen de esa diferencia.
“Existe la voluntad de abonarlo y el reconocimiento del monto. Falta establecer la metodología”, puntualizó un funcionario de Vidal.