En la continuidad de lo sucedido la semana anterior, la Usina Popular Cooperativa «Sebastián de María», continúa envuelta en un serio problema.
Más allá de la rápida actuación del Presidente del Consejo de Administración, Antonio Vilchez, es evidente que los controles contables son muy laxos y permiten fugas de dinero en forma constante.
Que hallan faltado 78 cheques y que por una casualidad se haya llegado a una auditoría contable que descubriera esta situación en muy preocupante.
Ahora queda la duda si esta problemática no se produjo en otras oportunidades, y que medidas van a tomar en el presente, y en el futuro, para que esta situación no vuelva a ocurrir.
Quedan muchos interrogantes sobre lo sucedido con el contador Francisco Medina, y su papel en la faltante de estos cheques y, por otra parte, queda saber cuántas personas más participaron de la maniobra.
No se ha podido conocer la postura del también concejal Medina sobre el particular y las acusaciones que pesan sobre su persona.
No ha realizado expresiones públicas al respecto, ya que la semana anterior, de acuerdo a versiones emanadas de la propia entidad cooperativa, se encontraba en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Es muy preocupante lo sucedido, ya que, reiteramos, es evidente que los controles contables y del manejo del dinero son muy laxos y fáciles de sortear.
Ahora, la justicia deberá investigar lo sucedido a partir de la denuncia penal que realizó la entidad y deslindar las responsabilidades.
Sin embargo, la Usina y sus autoridades tendrán que dar mayores explicaciones a sus asociados y trabajar para que esto no vuelva a ocurrir y saber si hubo situaciones similares en años anteriores.
Se dilucidará alguna vez o como tantas otras situaciones, para evitar que alguien abra la boca, se tapará todo y los únicos perjudicados serán los verdaderos dueños de la usina, los vecinos de Necochea.