Por Comisión de Educación de Unidad Ciudadana
Durante los días que corren previos al inicio escolar ha quedado más visible que nunca el ajuste brutal sobre la educación y las improvisaciones constantes a las que el sistema educativo de la Provincia se ve sometido.
Mientras se desarrollan las negociaciones salariales, con ofrecimientos irrisorios por parte del gobierno de María Eugenia Vidal (que intenta hacerte cómplice, diciendo “qué bueno lo que estamos haciendo juntos”), los directivos reciben la información de cierres de cursos en Educación Primaria y Secundaria y jubilaciones de oficio, lo que conlleva a la pérdida de aproximadamente 60 puestos de trabajo entre docentes, profesores, preceptores y Directivos en el Distrito ,multiplicados por 135 distritos en la provincia, no hay más que hacer la cuenta: 8.100 cargos.
El desembarco del nuevo sistema de licencias, incomprensible aun para la mayoría de las personas que trabajamos en educación y para el cual hay que disponer de recursos informáticos para poder solicitarlas no hace más que demostrar la creatividad que tiene la gobernadora para llevar adelante el ajuste, dado que no queda claro cómo se solicitaran suplentes en el caso que sea necesario.
En pocos tiempo, si las negociaciones salariales no prosperan, asistiremos a todo tipo de desprestigios hacia los docentes, cuestionarán su vocación, su formación profesional, todo esto para bajarnos el precio como trabajadores , con la complicidad de los medios de comunicación, quienes podrían recorrer las escuelas para corroboran como los docentes y directivos , pintan los salones, realizan capacitaciones, reparten cartas para recibir donaciones y apalear lo que este sistema económico está generando en las familias de la comunidad.
A todo esto cabe preguntarse cuál es la posición que toma el Jefe Distrital y a través de él, el Municipio frente a esta situación. Está claro que la declamación de la defensa de la Escuela Pública es políticamente correcta, pero dicha declamación debería tener correlato en las acciones de los hombres y mujeres que tienen responsabilidad en garantizar este derecho social fundamental para crecer como sociedad.