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Por Miguel Abálsamo

«Es mejor actuar y arrepentirse, que no actuar y arrepentirse» (Nicolás Maquiavelo, filosofo-político, autor del libro «El Príncipe»).

Concepto que, inspirado en ese genial hombre de la política, parecen que hicieron suyo hace pocas horas dirigentes importantes de Cambiemos-Fe de Necochea.

No importó el agobiante calor de un febrero pleno de verano, para que la Unidad Básica Nro.1, ubicada hace más de 30 años en el corazón del barrio oeste realizara la movida política del verano.

Tres concejales actuales, doctor Alejandro Issin y Gaby Gongora (Cambiemos-Fe), el contador Francisco «Pancho» Medina (Frente Vecinal Necochense), el diputado provincial Roberto Rago, el titular de la delegación Anses de la ciudad, ingeniero Pedro Barbieri y el Consejero Escolar Yamil Haedo, se sentaron en una misma mesa bajo la conducción de un histórico pronista, actual presidente de la Usina Popular Cooperativa y del Partido Fe, Antonio Vilchez.

¿El motivo de la convocatoria?… lo que siempre realiza dicho local partidario, ayuda social, en ese caso pensando en las necesidades que tienen las familias ante la iniciación de un ciclo escolar.

Sin embargo, hasta el menos entendido en política vernácula, o un turista desprevenido que requiere ayuda para llegar a la villa balnearia, percibe, huele a la distancia, especialmente si es peronista con ese olfato especial como distintivo, que no era un encuentro más, solamente ligado a un fin tan loable como es la ayuda social, hay un mensaje más profundo, fácil de descifrar.

Cambiemos-Fe es columna vertebral del proyecto provincial y nacional en el distrito, a partir de la decisión profunda de quien hoy es un faltante difícil de reemplazar, Gerónimo Venegas.

Este movimiento político decidido a actuar para no tener que arrepentirse tiempo después, ya mostró su visibilidad de cara a la sociedad, y lo hizo muy fortalecido, nucleando dirigentes de primer nivel en la estructura de Cambiemos, y titulares indiscutidos en cualquier equipo del Partido Fe.

El mensaje esta dirigido fuertemente a tres actores de nuestra comunidad:

1) A toda la sociedad.

2) A todo el ancho mundo de Cambiemos, donde convergen la UCR, el Pro (Martín Domínguez Yelpo conducción), sectores sin representación institucional (Pro-doctor Gabriel Mariscal), los seguidores «lilitos» surgidos recientemente (Laxalt-Lito Lelong) y otros minoritarios.

3) Partido Fe.

Precisamente en este último punto se están jugando fichas trascendentes, porque la estructura de Fe en Cambiemos-Necochea no es un símil de otros lugares en provincia de Buenos Aires, aquí es un factor fundamental, una columna vertebral.

Observando tres concejales, el diputado provincial, consejero escolar, titular de la Anses, y caras que no estuvieron en la «mesa chica» pero hicieron presencia en el encuentro, y el presidente del partido, Antonio Vilchez, cuantitativamente el resultado es, esta línea, o como se denomine, tiene a simple vista un potencial muy alto.

Todos repitieron a coro un mismo discurso «es el tiempo de seguir trabajando para la gente no para las candidaturas».

Es cierto.

Como también lo es que mirando esa mesa encontramos a varios dirigentes que seguramente estarán en la discusión final de las candidaturas, todo en su medida y armoniosamente, pero lo estarán.

Algo quedó claro.

Fe no tiene un candidato definido, comienza a correr con otros actores en la cancha pensando en las PASO (Primarias Abiertas Simultaneas y Obligatorias) del año próximo y la final por la Intendencia, sabedores también de la peligrosidad de dividir tropa ante un radicalismo que tal vez se presente con candidato único, más aún teniendo en cuenta lo sucedido en la última compulsa interna entre Diez (UCR)-Rojas (FE).

¿Cómo será el futuro en el HCD?

A nadie escapa que decir bloque mayoritario a Cambiemos en el Honorable Concejo Deliberante es una verdad a medias. Si lo hacemos sumando a todos los sectores, matemáticamente es correcto, si analizamos cada actitud y posicionamiento podemos hablar de diferenciaciones que saltan a la vista y para muestra sólo basta un botón, observar las sesiones llevadas a cabo en el legislativo, donde para lo único que parecen ponerse de acuerdo es en el horario de comienzo de sesiones.

Cambiemos tiene 9 concejales, dos de ellos son Issin-Gongora, definidos en la línea que encabeza el presidente de Fe, Antonio Vilchez.

¿Cómo actuarán en el legislativo… seguirán levantando manos en bloque o meditarán las decisiones?.

Esto parece debilitar al presidente del bloque, doctor Arturo Rojas, actual presidente del Consorcio de Puerto Quequén, abogado de la Anses y concejal de Fe, quien no fue invitado, aún por delicadeza, al encuentro en el local histórico del peronismo en barrio oeste, tiene que conducir un bloque donde pocos responden, compuesto por cinco integrantes, Issin-Gongora, la «independiente» Marisa Roldán y el todavía no demasiado trascendente, doctor Hernán Trigo, adquiriente de más notoriedad por su paso en el Somu intervenido que por proyectos en el deliberativo.

De aquella elección triunfante por meritos propios y por el tsunami arrollador de la señora gobernadora, María Eugenia Vidal, a este presente, sólo han pasado cuatro meses, que no parecen nada y sin embargo dejan su marca.

El doctor Arturo Rojas se ha ido debilitando, tal vez los propios conflictos en Puerto Quequén le llevan mucho tiempo a su militancia, sumado a su permanencia en el Concejo Deliberante (algunos le sugieren pedir una licencia), y aquel dicho «quien mucho abarca poco aprieta» adquiere vigencia digna de analizarse por parte de quien tiene objetivos importantes como cualquier dirigente político de nivel como lo es Rojas.

«Esto para Arturo es un golpecito duro», aseveraba por lo bajo un conocedor del peronismo.

Creo que ese «golpecito» más duro es el interno, que surge desde el corazón del Partido Fe, parido por «Momo» Venegas, adentro esta el parto más doloroso, cualquier dirigente con pretensiones sabe que lo primero es conservar lo propio, luego ir por lo demás, cuando lo propio comienza a deshilacharse la preocupación comienza a aumentarse.

Hoy, la movida política del verano de Vilchez, Issin, Gongora, Rago, Barbieri y compañía, más el alejamiento de Laxalt, Martínez, Lelong haciendo rancho con «Toty» Flores en la provincia, los animadores de cada viernes en esquina de 58 y47con Luis Andino y los amigos del «Momo», más pequeños sectores que desensillan hasta que aclare, parecen por un lado dejarlo un poco sólo al titular de Puerto Quequén y actual concejal o al menos comenzar a colocarle un condicionamiento para que el «pingo» no corra sólo la carrera.

Una carrera larga que tiene tres escalas, el armado durante el 2018, las Paso en el primer trimestre del 19 y la gran final por la Intendencia, sobran anotados.

Como en los grandes premios, es de largo aliento, salir primero no quiere decir llegar primero… muchas veces caballo que alcanza quiere ganar.