En Brasil el «racismo» es una realidad que se vive cotidianamente como demuestra «el genocidio contra los negros» por parte de las fuerzas de seguridad, afirmaron activistas que participaron hoy en el marchas por el Día de la Conciencia Negra.
Poco antes del mediodía, hora local, comenzó la Decimocuarta Marcha de la Conciencia Negra en el centro de Rio de Janeiro, en la que se recuerda la memoria del héroe Zumbi dos Palmares, el esclavo que formó una colectividad de hombres libres, un «Quilombo», en el siglo XVII.
El genocidio de millones de africanos traídos a Brasil durante la colonia portuguesa es una «herencia» que no ha sido superada hasta el día de hoy, sostuvo Adriana Moreira, de la organización Alternativa Preta.
«El pueblo negro marcha contra el genocidio, contra el racismo, nosotros sabemos que el pueblo negro es la principal víctima de la violencia de Estado», prosiguió Moreira.
Brasil fue el último país de las América que abolió la esclavitud, en 1888, y hasta hoy los descendientes de aquellos esclavos viven en un «gueto social», dijo el profesor José Vicente, rector de la Universidad Zumbi dos Palmares.
Un grupo de mujeres negras, luciendo los tradicionales vestidos y tocas de cabello blancas como en la época de la esclavitud, lavaron hoy por mañana el Monumento a Zumbi dos Palameres en la Avenida Vargas, en el centro de Rio de Janeiro.
«La consigna es resistencia, y a ella queremos agregarle la palabra empoderar, tenemos que trabajar con nuestra juventud para que los negros estén en el poder», afirmó Carlos Janan, coordinador del departamento de Igualdad Racial de la Alcaldía carioca, que participó en el acto frente al monumento a Zumbi.
En 2016 hubo unas 60 mil personas asesinadas en el país, el 71% de las cuales eran afrodescendientes, según un informe publicado por Forum Brasileño de Seguridad Pública.
De acuerdo con ese mismo estudio, la curva de violencia contra la población afrodescendiente ha crecido un 18% entre 2005 y 2015.
A través de proyectos que respaldan el incremento de las medidas represivas como la «guerra en las favelas» o la propuesta de anular la legislación que limita la venta de armas de fuego, se «alienta el genocidio, fundamentalmente contra jóvenes negros», planteó la activista Moreira.
A las 13 horas (15 GMT) cientos de personas se habían concentrado en el Museo de Arte de San Pablo (MASP) donde se vocearon consignas por la «conciencia negra» e interpretaron canciones, algunas del acervo heredado de los esclavos africanos.
Por la tarde se preveía iniciar una marcha desde el MASP, en la Avenida Paulista, hacia el centro viejo de San Pablo. Sandra Mariano, vocera de la Coordinación Nacional de las Entidades Negras, dijo que su agrupación salió «a las calles contra el genocidio de la juventud negra y el gobierno golpista de Michel Temer».
La diputada Leci Brandão, que convocó a la marcha en San Pablo, afirmó que ésta fue «para decir basta al prejuicio racial, queremos que se nos respete, queremos ciudadanía y más espacios de poder».(ANSA).
