El jefe de la policía de Nueva York, James OïNeill, admitió hoy que «en términos de muertes», el ataque terrorista del martes en Manhattan, con ocho víctimas fatales, fue el peor «desde el del 11 de septiembre» de 2001.
De los 12 heridos, tres fueron dados de alta y algunos de los que permanecen hospitalizados están graves pero estables, confirmó la policía este martes. Por otra parte, medios belgas confirmaron hoy la identidad de la joven de 31 años de esa nacionalidad que perdió la vida en el atentado. Se trata de Ann-Laure Decadt, madre de dos niños, de 3 años y 3 meses. Originaria de Staden, oeste de Flandes, visitaba Nueva York junto a su madres y dos hermanas, que resultaron ilesas.
Cinco turistas argentinos también murieron, lo que puso en estado de shock a ese país y llevó al presidente Mauricio Macri a llamar a la unidad en la lucha contra el terrorismo que, según dijo, «no puede tener zonas grises». La ciudad de Nueva York reforzó hoy sus medidas de seguridad, con una mayor cantidad de agentes desplegados en sitios clave, como el World Trade Center, cerca de donde se produjo el ataque.
«Verán un mayor número de agentes en los trenes, en las estaciones», dijo el jefe de la policía y anunció que la seguridad para el maratón de Nueva York, que se correrá el domingo próximo, será reforzada. «Será un evento seguro», subrayó. Pero los fantasmas de un atentado están sobrevolando a la legendaria competición que recorre las calles de la Gran Manzana. Como todos los años, la prueba reunirá a 50.000 corredores de 180 países y a casi tres millones de personas en sus calles. En tanto, trascendió hoy que el atacante, Sayfullo Saipov, había sido interrogado por agentes federales del Departamento de Seguridad Nacional en 2015, por sospechas relacionadas con sus vínculos yihadistas, pero no se hallaron pruebas en su contra.
Lo informó la cadena ABC y agregó que el nombre y la dirección de Saipov fueron indicados como «punto de contacto» para dos personas incluidas en la lista de antiterrorismo porque proceden de los considerados «países amenaza». Uno de ellos está desaparecido y es buscado como «sospechado de terrorismo».
La policía afirmó que Saipov jamás había sido investigado por el FBI.
Por su parte, un agente de esa dependencia habló de investigaciones «en fase preliminar». «Efectuamos requisas durante toda la noche y continuaremos durante todo el día», afirmó William Sweeney.
John Miller, vice comisario de la policía de Nueva York, informó hoy que Saipov «llegó a Estados Unidos en marzo de 2010 y está legalmente en el país».
«Planificó el ataque durante semanas», sostuvo, y agregó que el atacante se encuentra en el hospital de Bellevue, donde permanece bajo arresto. «Hubiera seguido matando gente si la camioneta no choca con un autobús escolar», aparentemente dijo hoy el asesino a los investigadores, según revelaciones de prensa no confirmadas.
Saipov parece haber seguido instrucciones de Estado Islámico disponibles en Internet sobre cómo llevar a cabo un ataque, afirmó hoy la policía, de acuerdo a las investigaciones en curso.
Agregó que en la furgoneta con la que efectuó el atentado se hallaron diversos cuchillos y algunos apuntes escritos a mano, en árabe, con indicaciones.
En uno de ellos se lee una frase inquietante: «El Estado Islámico durará por siempre». (ANSA).