Por Miguel Abálsamo.
El fin de los partidos políticos tal cual los conocimos históricamente ha producido cambios profundos, especialmente en las nuevas generaciones, sin aferrarse a las formas tradicionales, a la adhesión ideológica heredada de padres o abuelos, a la persistencia por siempre a una idea.
Hoy, reducidos números de nuestra sociedad afianzan su identidad partidaria, más bien son cambios que se producen en cada elección, o bien siguiendo el carisma de un candidato, el proyecto presentado, momentos sociales o económicos que vive la República, cambios que se acentúan por hastío que produce un gobernante de muchos años, y la incidencia individual de lo que nos pasa a la hora de emitir el voto.
Aquella frase… «peronistas somos todos», que emitió en España durante su largo exilio el general Juan D. Perón al referirse al pensamiento de una gran parte del pueblo argentino, queda sintetizado en la gran cantidad de dirigentes, militantes y adherentes que sintiendo esa idea hoy se ven representados en sectores oficialistas y en el propio oficialismo nacional, mucho más en la gobernación de la provincia de Buenos Aires.
Al radicalismo no podríamos estrictamente asignarle un concepto tan acentuado como el referido al peronismo, pero tiene lo suyo, disimulado con una alianza de poder que de no haber concretado con el «macrismo» lo tendría en el subsuelo de la historia.
En nuestro distrito existe un «radicalismo para todos los gustos».
Que puede venir de la mano de Cambiemos, de la independencia de pensamiento, de la libertad de conciencia, de integración incluso a la administración que actualmente conduce los destinos del distrito.
Ese «radicalismo para todos los gustos», se vio condimentado entre semana por declaraciones como la del ex Presidente del Concejo Deliberante, ex titular de la Juventud en época del mandato de gobierno del intendente radical, doctor Daniel Molina, y actual representante municipal en el área de Derechos Humanos, Sebastian Ebi, quien al manifestar… «somos radicales que votaremos a Cambiemos en provincia y Nación, apoyando las políticas del presidente Mauricio Macri y a nuestra gobernadora María Eugenia Vidal, pero en el orden la lista del intendente Facundo López, que encabeza Diego López Rodríguez como concejal».
En realidad, lo manifestado por Ebi no hace nada más que volver a repetir lo de dos años atrás, cuando abriendo un local en calle 68 entre 59 y 57, que todavía mantiene las fotos de Vidal-López, militaron esa idea junto a radicales como Nicolás Di Fiori, José Luis Pagliaro, entre otros, hoy funcionarios municipales, al igual que las figuras de Sebastián Sarasibar o el doctor Pedro Barrientos, quienes también profesan la misma ideología y el mismo sentir en el orden casero.
Sin embargo estos conceptos no tuvieron en este presente la misma pasividad que en el 2015, siendo muy cuestionados por radicales que componen el comité «Emiliano Abasolo», que sintieron el golpe y quieren accionar sobre aquellos que expresan esa idea.
Aquella vez, hace 24 meses, otros sectores radicales no acompañaron a Cambiemos, caso el doctor Fernando Khun, candidato de una alianza con el Socialismo, o la propia joven Graciana Maizzani, quien expresaba su apoyo a la misma vertiente que enfrentaba al radicalismo oficial en Necochea.
Recordar las fotos sonrientes de Victoria Donda con Khun a su izquierda y Maizzani a su derecha, siendo otro de los acercados en este marco el ex concejal radical Alejandro Guridi, mientras el ex intendente de dos períodos, doctor Daniel Molina vía face y twiteer dejaba su impronta… «los radicales no votamos candidatos peronistas».
Sin dudas que todo el mundo guarda un muerto en el baúl…o mejor dicho, una idea política afirmada rotundamente en su momento pero cambiada según circunstancias, algo que no esta ni peor ni mejor, simplemente deja dudas cuando se juegan opiniones tan tajantes en un momento y con una simple mirada al corto pasado se desmorona como castillos de arena.
El peronismo tiene en el distrito varias opciones.
Doctor Arturo Rojas en Cambiemos, Andrea Caceres en Unidad Ciudadana, el propio doctor Facundo López, Luciano Lescano con el sello del PJ tradicional, y el destino hace que además sean las opciones más fuertes del distrito.
Por eso el socialismo de Walter Barrientos a la cabeza de la tira de concejales envía un mensaje muy dirigido con cierta picardía…» somos la opción de voto para muchos radicales…».
El votante radical hoy es una pieza codiciada, que adquiere el valor que tal vez no tenía en pasadas elecciones, al igual que el suelto votante peronista, sumados a los miles de independientes que cambian su voto elección tras elección y los 28.000 que no concurrieron a las urnas en las pasadas PASO.
Verticalismo radical. «todos adentro…»
Si de algo renegó el radicalismo sobre las formas del peronismo es en el verticalismo, ese fiel seguimiento a la idea un líder con su pueblo, ese ejercicio del poder estructurado según la jerarquía de las conducciones.
Parece que ha llegado la hora de practicar algún verticalismo disimulado por la vergüenza que suele operar en los «correligionarios» a la hora de fundamentar esta acción.
Pero… la hora obliga a tratar de alambrar algunos caminos, cerrar puertas y ventanas y que todos se queden a buen resguardo, ergo, dentro de la orden radical de las cúpulas locales, Alberto Esnaola, Pedro Azcoiti, la actual presidenta Carola Bertoldi, el joven Damian Unibaso, con la firmeza de no dejar cabos sueltos para que la historia se repita, y los votos radicales estén en Cambiemos con la lista que posibilitara que tres concejales peronistas ,Arturo Rojas, Gabriela Góngora y Alejandro Issin se siente en el Concejo Deliberante el diez de diciembre por cuatro años, con la expectativa de la aparición en el reparto de la cuarta concejal, Graciana Maizzani (UCR),quien será la única que puede conservar la banca de los «correligionarios» tras el final del doctor Esnaola.
Se cumplió la legalidad y también se produce la injusticia, el dirigente Gonzalo Diez, perdedor por nada de nada con Arturo Rojas en una suma matemática entre ambos de 27.000 votos, estará ausente de la posibilidad de pelear una concejalía.
No sólo el radicalismo tiene dudas en cuanto a sus votantes, también otros sectores de nuestra vida política, Unidad Ciudadana con su triunfadora Andrea Caceres, y su «Campora», no han podido sumar al trabajo a la derrotada Silvia Jensen y sus «pejotistas-sindicalistas», unidos tan sólo por la figura de la doctora Cristina, mientras que la tercera lista en esas Paso, doctor Luis Giampaoli,ha sido clara y contundente emitiendo un comunicado de prensa con la firma de su mentor,el abogado Cesar Lisa… «acompañamos pero no nos integramos. Queremos sean elegidos senadores Cristina Fernández de Kirchner y Jorge Taiana. En el próximo proceso electoral en Necochea estamos en esta acción, NO en la integración con otros sectores locales».
Ni radicales, ni peronistas, ni tan siquiera el «kircherismo», que tiene un voto ideológico muy duro, pueden conducir lo total, convencer a los suyos y evitar las diásporas.
En el distrito se da otra situación.
Aquí la polarización no será «macrista-cristinista», porque aparece un actor clave, la lista del intendente Facundo López, esto hace que podamos dividir la elección en más de dos posibilidad para acceder a bancas al legislativo o bien se termine dando ese mano que la sociedad palpita ,Facundo López- Arturo Rojas, la coyuntura actual parece ir en esa dirección.
«Con la gobernadora nos llevamos más que bien…»
Excelente que un intendente de un signo diferenciado a la gobernadora bonaerense, se lleven bien, esto se llama adultez político y comprensión de la realidad, donde hay que anteponer cuestiones personales a beneficio colectivo.
Sin embargo el énfasis puesto por el intendente cuando se le preguntó sobre su relación con la gobernadora Vidal…»nos llevamos más que bien», no hace nada más que dar paso a los analizadores quienes dejan como profecía que luego de las elecciones de octubre podrían darse algunos cambios en el orden local, cuando se vuelvan a acomodar las piezas en el delicado ajedrez de nuestra política.
¿Podemos imaginar una gobernadora de Buenos Aires que cobije en ese paraguas tan atractivo que tiene en la actualidad, al intendente López, al titular del Puerto Quequén, Rojas, al radicalismo, a amplios sectores del peronismo, junto a dos figuras muy importantes ,los dos diputados provinciales, Roberto Rago y Martín Domínguez Yelpo..?
Parece no simple, pero tampoco una novela de ciencia-ficción… a veces en política es más increíble la realidad que la ficción.
Todo se puede dar en un marco que parece proyectarse nuestro distrito.
Aquí lo trascendente no es a que dirigente le va mejor o peor, como son las alianzas o crecimientos de sectores, aquí lo vital es como desarrollamos el distrito, lo seguimos sacando del estancamiento más profundo de los últimos tiempos, podamos mejorar en todo aspecto y colocar a Necochea-Quequén en el lugar que se merece como distrito y que nuestra sociedad añora.
Por eso que la elección de octubre será importante, como todas las que se realizan, cada uno haciendo su juego, claro esta que luego de octubre se abrirán otros juegos, donde los grandes protagonistas puedan avanzar por diferentes andariveles o bien en contrarse en la misma hoja de ruta.
Eso será el «día después».
Mientras tanto en el «día de hoy», radicales se verticalizan para atar a libres pensamientos, peronistas ofrecen un menú variado en sus diferentes restaurantes electorales, cada cual quiere evitar fugas de votantes, y otros alimentan a «José Tijeras», que suele andar afilado en nuestro pago chico.
Sería aconsejable que la polarización López-Rojas no provoque grietas muy pronunciadas, que obliguen en el corto plazo a la señora gobernadora de Buenos Aires y su equipo de Obras Pública, a tener que tapar rápidamente.