El Gobierno ya tomó la decisión de otorgarle el escrutinio provisorio a la española Indra, salpicada por escándalos de corrupción en todo el mundo y a cargo de todas las elecciones del kirchnerismo.
Como anticipó LPO, el Correo Argentino S.A. hará la licitación recién las próximas semanas para otorgársela a Indra, por ser la única en condiciones de cumplir los requisitos a tan poco tiempo de los comicios. Se trata de una maniobra habitual cuando se quiere direccionar una contratación desde el Estado.
El traslado de la licitación de la Dirección Nacional Electoral al Correo no es inocente, este organismo por ser una SA tiene muchos menso controles y más flexibilidad para contratar.
Desde el propio Gobierno le confirmaron el triunfo de la española al diario La Nación, en lo que prácticamente constituye la confesión de un ilícito, ya que la licitación aún no se lanzó de manera que si se tratara de un proceso transparente debería ser imposible saber quien va a ganar y cuanto va a ofrecer.
Además de Indra, otras dos empresas -Smartmatic y MSA- habían manifestado su intención de competir con la española por el contrato del escrutinio, pese a que ya circulaba la versión de una preferencia de la administración de Macri9 por darle el contrato a Indra, que cuenta al interior del Gobierno con el apoyo del asesor presidencial José Torello.
Con la nota publicada este sábado por La Nación, los abogados de esas firmas ya analizan acciones de amparo para impugnar una licitación que abiertamente se ha declarado direccionada, con una desfachatez pocas veces vista.
La razón del triunfo sería que Indra presupuestaría 23 millones de dólares, 7 menos que el costo pagado por Cristina Kirchner en 2015, pero con una salvedad: No se escanearán los telegramas, como tanto reclamó Macri que se hiciera en los comicios que lo consagraron para evitar fraude.
Lo notable es que ese supuesto «descuento» de la española que el Gobierno ahora festeja, no motivó a la administración de Macri a analizar sino estaba contratando a una empresa que podría haberse colusionado con el kitchnerismo para abultar sus cosos, como hizo en otros lugares del mundo.
En España, el caso Indra ya alcanzó dimensiones similares a Odebrecht en Brasil -con políticos y ejecutivos presos-, porque la justicia detectó que financiaba ilegalmente al menos al Partido Popular a cambio de obtener contratos con sobreprecios.
Tal como anticipó este medio, el nexo de Indra con el Gobierno es el ex Director Electoral del kirchnerismo Alejandro Tullio, reconvertido en director de Asuntos Públicos del Correo Argentino, la empresa estatal dirigida por el ex Socma Jorge Irigoin, quien acumula causas en Tribunales tras la polémica condonación de deuda al Grupo Macri por la concesión de la compañía e los 90.
Tullio le ofreció el servicio de Indra a José Torello, asesor presidencial y amigo de Macri, quien interesado en la oferta frenó un proceso de licitación iniciado en enero por Adrián Pérez, que en la industria conocían y consideraban impecable.
Ajeno a esa decisión, Torello pasó la tarea al Correo S.A. con Tullio como encargado de hacer un pliego a medida de Indra, que parece sólo tener éxito en Argentina: el escándalo en España ya obligó a renunciar a Esperanza Aguirre, ícono de la fuerza del presidente Mariano Rajoy.
Sus incursiones por el mundo tampoco quedaron exentas de escándalos. El año pasado estalló una investigación en Brasil donde la investigan por haber pagado coimas a políticos de ese país para conseguir contratos con el Estado.
Situación similar había pasado en Argentina en 2005 cuando el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime le ofreció que hicieran aportes a la campaña del kirchnerismo a cambio de contratos. Por entonces Tullio ya oficiaba de intermediario, situación que mantuvo inalterable con el macrismo.
En cuanto a su papel en las elecciones, en 2010 fue sancionada en Barcelona por «faltas graves» durante una consulta. En 2012 fue acusada en Angola de complicidad con el gobierno. En 2015 tuvo una seria falla en el recuento. Y el año pasado fue denunciada por serias irregularidades en el recuento en República Dominicana.
Todos antecedentes que enturbian la decisión de entregarle este comicio y que cuando se concrete también proyectará una sombra compleja sobre la Cámara Nacional Electoral que integran Alberto Dalla Vía y Santiago Corcuera, autoridades últimas del próximo comicio.