La noticia pasó desapercibida. Es que, al principio, la gran mayoría de los productores agropecuarios de la provincia de Buenos Aires creyeron que había un error en las notas que venían recibiendo de ARBA durante los últimos días.
Pero no: el gobierno de María Eugenia Vidal decidió modificar la base imponible de la valuación de los campos que derivó en un fuerte aumento del Impuesto Inmobiliario Rural justo en medio de las inundaciones que afectan a algunos sectores de la provincia.
En total fueron alrededor de 14 mil notificaciones que envió el gobierno bonaerense a los productores bajo la denominación «Nuevo Valor Tierra Rural Libre de Mejoras» con un plazo de 10 días para presentar un descargo y evitar que quede firme la suba.
Lo curioso es que para hacer el nuevo revalúo a través del formulario 911, el titular de ARBA Gastón Fossati, empleó una planilla creada en 1955 por Juan Domingo Perón con el objetivo de medir la capacidad contributiva de los campos bonaerenses.
La decisión desconcertó a los productores: a algunos la medida les hizo recordar a los tiempos en que gobernaba la provincia Daniel Scioli y hubo bronca con el gobierno de Cambiemos, pero por ahora entre la dirigencia rural no creen conveniente salir a expresarlo públicamente.
Lo concreto es que CARBAP -cuya entidad madre es CRA- recomendó mediante una nota a sus asociados realizar rápidamente el descargo «en caso de verificarse diferencias interpretativas respecto a la aptitud agropecuaria que determina ARBA».
Pero no es un tema tan sencillo. Por ejemplo, dos de los ítems que mide ARBA son la capacidad ganadera o salinidad del agua del subsuelo, que solo pueden ser evaluados mediante estudios de campo y nunca con datos satelitales.
Como sea, en diálogo con LPO, el presidente de CRA, Dardo Chiesa, reclamó una reforma impositiva integral. «No podemos esperar a que este debate se postergue hasta el 2018 o 2019 por estar en un año electoral», apuntó el dirigente.
«Hoy cualquier producto que circula por el país tiene un 50% de impuestos que atenta contra la producción y el empleo. El productor sufre una superposición de impuestos municipales, provinciales y nacionales que los paga un solo bolsillo», agregó.
El aumento del Inmobiliario Rural generó bronca en el campo porque en la actualidad el partido de General Villegas se encuentra bajo agua desde hace varios meses, mientras que en las últimas horas se registraron graves daños en Tandil por un temporal.
En tanto, algunos productores manifestaron también su indignación en las redes sociales por la medida del gobierno bonaerense. «No podemos producir con esta presión tributaria», se quejó el dirigente Roberto Campi, de la zona de Pergamino.