martes, noviembre 26, 2024

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Autovía 2. Los peajes más caros

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La autovía 2 de la provincia de la provincia de Buenos Aires, que conecta con Mar del Plata y es uno de los caminos más utilizados durante todo el año, tiene los peajes más caros, según reveló un informe del Centro Argentino de Ingenieros Agrónomos (Cadia) al que accedió Diagonales. Mientras en ese corredor vial se pagan $24 cada cien kilómetros incluyendo la Autopista La Plata – Buenos Aires (AUBASA), en otros dos se abona menos de la mitad.

Para el estudio se analizaron los costos de peaje de tres corredores: Buenos Aires – Mar del Plata; Buenos Aires – Rosario y Buenos Aires – Azul, para usuarios de categoría 1 (autos y motos) como se lee en los cuadros comparativos que forman parte del informe. En el primero de los tramos la relación precio-distancia es de $24 cada cien kilómetros; en el segundo tramo analizado el costo es de $10,67 cada cien kilómetros y el tercero de los corredores deja un saldo de $10 de peaje cada cien kilómetros. Es decir que en la autovía 2 se abona un 132,22% más de promedio cada cien kilómetros.

El primero de los corredores viales está compuestos por un tramo de autopista y otro de autovía; el segundo es un recorrido a pura autopista y el tercero es una canasta de caminos: autopista-autovía y ruta nacional 3.

Ricardo Lasca, integrante del Cadia y coordinador del Comité Nacional de Defensa del Usuario Vial (Conaduv), sostuvo ante la consulta de Diagonales que “el peaje no es un pago a cuenta, ni un crédito al concesionario. Es el pago de una contraprestación real ofrecida, es decir, primero las obras y luego el recupero por peaje”.

“El sistema de peaje con cabinas de cobro en ruta, está concebido para cuando primero se hacen las obras, luego se recupera la inversión a través de tarifas razonables y con la existencia de caminos alternativos libres de pago. En nuestro país se ha implementado un sistema de ‘falso peaje’ o ‘impuesto al tránsito’, un sistema inédito en el mundo, que es un peaje de mantenimiento sobre rutas existentes y sin caminos alternativos libres de pago”, detalló el experto y razonó: “En definitiva, el actual sistema perverso de peaje directo con cabinas de cobro en ruta que rige en la red caminera del país, tanto en el ámbito nacional como en algunas provincias, es claramente injusto y antieconómico, y carente de todo fundamento técnico económico desde el punto de vista de la ingeniería económica de transporte”.

El profesional no descartó nuevos aumentos en las tarifas de la autovía 2 y la ruta 11 para la temporada de verano 2015, que puede elevar la tarifa “a cien pesos” montó que consideró “un robo”. También le apuntó al Defensor del Pueblo, Carlos Bonicatto, al que acusó de “no hacer nada” por el estado de las rutas y los costos de peajes. El 13 de junio de 2011 le enviaron una nota detallando una serie de puntos a tener en cuenta para analizar o corregir y nunca recibieron respuesta del planteo.

En varios informes emitidos desde la Conaduv se resalta el dictamen firmado por Elena Highton de Nolasco, integrante de la Corte Suprema de Justicia nacional en el que sentenció que el “régimen de concesionarios viales por peaje es un servicio público enmarcado en la relación de consumo de jerarquía constitucional (art.42 C.N.) y ley 24.240 cuya tutela de los consumidores y el usuario alcanza también a los servicios concesionados. El peaje que paga el usuario es el precio de un servicio”.

Otras referencias.

Pero apuntalar el trabajo de análisis, se tomaron como puntos de comparación otros tramos de los mismos corredores y se arribó a una conclusión similar. En el tramo Ciudad de Buenos Aires-Chascomús, los usuarios deben desembolsar $53 por un recorrido de ciento quince kilómetros; desde Buenos Aires a la localidad de Lima el costo es de $25 por 110 kilómetros de viaje y desde Ciudad Autónoma hasta el partido bonaerense de San Miguel del Monte se paga $23 por un viaje de ciento veinte kilómetros.

Por las características de los corredores viales, la ex ruta 2 es uno de los caminos que mayor comodidad presenta para los automovilistas. Se lo puede comparar con la Autopista Nacional Ruta 9. Sobre la autovía 2, en la estación de peaje de Samborombón y tras un recorrido de noventa kilómetros el usuario paga $35 por cada viaje. En la ruta nacional 9, a la altura de la localidad de Zárate y luego de rodar un trayecto de noventa y cuatro kilómetros, en la cabina de peaje se abona un quinto del valor, es decir, $7.

Si se toma el caso de la nueva Autopista Rosario-Córdoba se paga, siempre en la misma categoría, $22 por un recorrido de 360 kilómetros, cuando en la Autovía Buenos Aires-Mar del Plata se abona $70 por trescientos cincuenta kilómetros.

Incumplimiento.

Otra caso recordado por el ingeniero Lasca, es el de la autopista La Plata-Buenos Aires. En otro de los informes a las que accedió Diagonales se detalla que en ese corredor “se cobró durante siete años la tarifa plena o total de $3,80” que en ese momento la paridad con el dólar era uno a uno “para una obra que estaba al cincuenta por ciento”.

Luego de siete años se habilitó el segundo tramo a la ciudad de La Plata. “Los usuarios viales estuvimos pagando el total de la tarifa durante ese tiempo por sólo treinta kilómetros de los sesenta que son en total” ya que la empresa Coviares, entonces concesionaria de la traza “tenía la obligación de realizar la famosa autopista ribereña para conectar el norte con el sur” de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, pero en una de las renegociaciones entre el gobierno nacional y el concesionario, ese compromiso fue anulado.

Lasca recordó que “al inicio del año 2013, el Estado nacional pasó esta autopista a manos de la provincia de Buenos Aires y el gobernador Scioli autorizó en forma inmediata un aumento de hasta el 400% en apenas un año y medio del traspaso, es decir que los usuarios viales deberán hacerse cargo, vía aumento de tarifas, de los graves incumplimientos de Coviares”.