Si bien las estimaciones de los técnicos hablan de lluvias en las próximas horas en la región, la incógnita es saber si serán suficientes para permitir el inicio de las tareas de siembra de cultivos de cosecha fina, con la adecuada humedad en el suelo, ya que de lo contrario los riesgos que enfrentaría el productor son muy altos.
La sequía se produce tras 60 y hasta 90 días de precipitaciones muy escasas, ya que por ejemplo en sectores de Coronel Dorrego, no se anotan lluvias significativas desde marzo pasado.
Así lo indican las apreciaciones del Departamento Agronómico de la Cooperativa Agraria de Tres Arroyos, destacando que el panorama es muy complicado si persiste la carencia de lluvias suficientes.
El informe del INTA Castelar, que se entrega semanalmente a través de dicha entidad, destaca que “el frente que se ha mantenido estacionario sobre el sector patagónico durante los últimos días inicia su pasaje sobre el centro y norte del país a partir de hoy, con lluvias de volumen superior a 20 mm en algunas áreas del sur de Buenos Aires y La Pampa y mas débiles sobre el centro y norte de Buenos Aires y Entre Ríos.
Para mañana se mantiene la lluvia sobre Buenos Aires, La Pampa y Entre Ríos (del orden de 20 mm.) extendiéndose hacia la noche hacia el norte del sector mesopotámico. Durante el sábado mejoran las condiciones meteorológicas, esperándose buen tiempo el domingo y lunes.
Finaliza diciendo que “a partir del martes se inicia el pasaje de un nuevo frente con probabilidad de lluvias que continuarán el día miércoles integrando zonas de la franja semiárida no van a ser favorecidas por el pasaje de los próximos días. Con posterioridad al pasaje del frente de la próxima semana se espera un marcado descenso de la temperatura”.
Menor área para el trigo
Para la Cooperativa Agraria, la disminución de la superficie asignada al trigo duro oscilará entre 10 y 20 por ciento en promedio, según los sectores, lo que significaría entre 20.000 y 40.000 hectáreas de reducción, en el caso del distrito de Tres Arroyos, y de 80.000 a 160.000 en cuanto al total de la región, siendo la menor estimación de baja de superficie la de la Secretaría de Agricultura.
De todas formas, llegar al 20 % de disminución sería generalizar una baja que para los técnicos de la cooperativa se dará solamente en algunas áreas.
El organismo nacional estima que de 825.500 hectáreas de trigo duro de la campaña anterior, se bajaría a 743.000 hectáreas, es decir el 10 por ciento.
El informe técnico
Los profesionales asignados a la tarea en la Cooperativa Agraria señalaron por ejemplo que se estima factible que la superficie de trigo duro en el este del distrito de Coronel Dorrego se reduzca en el 20 por ciento, incidiendo el escaso margen que el cultivo ofrece en virtud de las medidas gubernamentales vigentes, que “achatan” el valor internacional que deberían percibir los productores y los costos crecientes que aparecen en todo el ciclo, por ejemplo los fertilizantes y agroquímicos. No es conveniente sembrar en este momento, si antes no se registran precipitaciones de 30 mm como mínimo; el panorama ganadero, con carencia total de pastos, es muy grave y un elemento adicional para el incesante aumento de costos reproducción.
En el distrito de González Chaves, también se supone que el trigo duro disminuirá en alguna medida su superficie, pero el disminuir la aplicación de fertilizantes y otros insumos es una alternativa que el productor analiza en tanto aguarda la solución del conflicto con el Poder Ejecutivo Nacional. Cebada y avena pueden ser opciones alternativas o aumentar el área de cosecha gruesa.
En la franja norte del partido de Tres Arroyos, hay algunas actividades como los movimientos de tierras y aplicación de herbicidas, pero sin definiciones en cuanto a los cultivos. La cebada cervecera merece consultas a los técnicos y aunque su valor estará atado al del trigo, como ocurre en el sistema vigente hasta ahora en los contratos de siembra con las malterías, no puede descartarse que se amplíe la siembra.
La región sur y costera de Tres Arroyos tendría algunas variantes de superficie de trigo duro, pero sin precisarse su magnitud, aunque sí el manejar la opción de disminuir el uso de insumos para abaratar el costo de implantación. No es mucha la superficie que habitualmente se destina a cebada cervecera, pero podría crecer en alguna medida.