El kicillofismo desafía a Máximo y Massa y abre una batalla total en la Provincia
El Gobierno bonaerense confirmó que buscará derogar el límite a las reelecciones de los intendentes en 2026. Carlos Bianco calificó la restricción como «proscriptiva». Cruces internos en el oficialismo y la moneda de cambio que ofrece la oposición.
El cierre del año político en la provincia de Buenos Aires ha dejado planteado el escenario para una de las batallas más intensas del 2026: la reforma política. En el centro de la escena, el kicillofismo ha decidido mover primero, anunciando que impulsará el debate para habilitar las reelecciones indefinidas de los intendentes, una movida que no solo busca blindar el poder territorial de los jefes comunales, sino que también tensa al máximo la cuerda con Máximo Kirchner y Sergio Massa.
El argumento de la «proscripción»
En una reciente conferencia de prensa, el ministro de Gobierno y mano derecha de Axel Kicillof, Carlos Bianco, fue tajante al defender el sistema de mandatos ilimitados. «Impedir la reelección de una persona tiene carácter proscriptivo», lanzó el funcionario, argumentando que el voto popular es la única herramienta democrática válida para definir la continuidad de un dirigente.
Esta postura busca dar respuesta a una realidad urgente para la política bonaerense: 82 de los 135 intendentes (pertenecientes a todo el arco político) están hoy imposibilitados de buscar un nuevo mandato en 2027 debido a la ley vigente.
El oficialismo, fracturado
Pese a la voluntad de Kicillof, el frente interno está lejos de ser monolítico. Las diferencias exponen las fisuras en el peronismo:
- La Cámpora: Máximo Kirchner ya marcó la cancha sugiriendo que los intendentes que no puedan reelegir deberían nutrir las listas de legisladores nacionales en 2027. Para el líder camporista, el debate es «más profundo» y evita dar un cheque en blanco a los alcaldes.
- Frente Renovador: Sergio Massa mantiene su histórica postura contra las reelecciones indefinidas. Si bien el massismo asegura que no será un «obstáculo» para que el tema se debata en la Legislatura, sus diputados y senadores ya tienen la orden de votar en contra.
El juego de la oposición: ¿Boleta Única por Re-re?
En la vereda de enfrente, el panorama es pragmático. Los libertarios han dejado trascender que podrían acompañar la iniciativa de Kicillof, pero con una condición innegociable: la implementación de la Boleta Única de Papel (BUP) para las próximas elecciones provinciales.
Por su parte, el PRO se mantiene dividido, mientras que la UCR podría verse seducida si la reforma incluye el histórico reclamo de la autonomía municipal, permitiendo que cada distrito defina sus propias reglas de juego.
Los tres caminos para la Reforma
Para lograr el regreso de las «re-re», el Ejecutivo baraja tres estrategias legislativas con diferentes grados de complejidad:
| Estrategia | Alcance | Dificultad |
| Modificación de la LOM | Cambiar el Art. 3 de la Ley Orgánica de las Municipalidades. | Baja (Vía directa) |
| Reforma con nuevas figuras | Incluir la figura del «viceintendente» para reiniciar el cómputo de mandatos. | Media |
| Autonomía Municipal | Reforma constitucional para que cada ciudad decida su régimen. | Alta (Requiere consenso total) |
Un cierre de año con proyectos «sacrificados»
La tensión política ya se siente en el Senado bonaerense, donde el bloque cercano a Cristina Kirchner ha cuestionado duramente a la vicegobernadora Verónica Magario. La falta de acuerdos no solo bloquea la designación de autoridades, sino que ha puesto en riesgo proyectos clave de salud enviados por Kicillof, como la creación del Centro de Industria Farmacéutica, que están a punto de perder estado parlamentario.
Con las sesiones postergadas para el próximo año, el 2026 se perfila como el año donde se definirá no solo el futuro de los intendentes, sino las reglas de juego para la carrera presidencial del propio Kicillof.
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