La Exploración Continúa a la Sombra de los Resultados Iniciales
A pesar de la expectativa que generó el pozo Argerich, los proyectos de la petrolera Shell en los bloques CAN-107 y CAN-109 avanzan con cautela.
Cada vez es más latente que una tendencia exploratoria desfavorable pueda desalentar futuras inversiones en la Cuenca Argentina Norte.
La actividad de exploración sísmica en la plataforma continental argentina, frente a las costas de Necochea y Mar del Plata, se mantiene en curso, concentrando la atención de la industria petrolera y el debate ambiental.
Sin embargo, el entusiasmo inicial se ha moderado, especialmente tras la ausencia de resultados positivos inmediatos en el pozo exploratorio Argerich, perforado por Equinor en el bloque adyacente CAN-100.
El foco de la exploración se centra ahora en la campaña que Shell lleva adelante en sociedad con Qatar Petroleum en los bloques CAN-107 y CAN-109.
Tras el relanzamiento del interés por el offshore argentino, Shell culminó en abril pasado una exhaustiva campaña sísmica 3D, que cubrió más de 15.000 kilómetros cuadrados durante 120 días.
Este relevamiento es el primer paso de una inversión multimillonaria destinada a identificar potenciales reservorios de hidrocarburos.
Análisis y Cautela
Actualmente, los datos recopilados por Shell y Qatar Petroleum están en una fase intensiva de análisis e interpretación geológica.
Este proceso, crucial para mitigar riesgos y determinar la ubicación precisa de futuras perforaciones exploratorias, podría extenderse hasta el año 2026.
Solo una vez que finalice este estudio de alto riesgo, las compañías tomarán la determinación de avanzar a la costosa fase de perforación, la cual definirá la existencia o no de reservas comerciales de petróleo o gas.
El análisis que se maneja en el sector es claro: en un mercado global altamente competitivo, las decisiones de inversión se basan en la maximización de retornos. Si la Cuenca Argentina Norte (CAN) no demuestra tener un potencial comparable a otras cuencas offshore en el mundo, las empresas podrían optar por desviar su enfoque y sus recursos.
El Riesgo de Desinversión
El panorama de la exploración se encuentra en un momento de redefinición. El sector advierte que el entusiasmo inicial podría verse atenuado por un contexto general de hallazgos que no cumplan con las altas expectativas.
Si la tendencia exploratoria general se mostrara poco fructífera en esta parte de la CAN, existe una posibilidad latente de que gigantes energéticos como Shell replanteen su estrategia a largo plazo.
Un escenario de repetidos resultados exploratorios negativos o magros, más allá de los compromisos de inversión ya aprobados, podría desalentar a las empresas a seguir invirtiendo a gran escala en el país.
Por el momento, Shell mantiene su hoja de ruta y la industria espera con expectativa los resultados del análisis sísmico.
Sin embargo, la continuidad y la escala de la inversión futura en el offshore argentino dependerán de que los datos preliminares logren disipar las dudas que podrían surgir de una tendencia exploratoria que no cumpla con las altas expectativas iniciales.
La decisión final, que podría marcar el futuro energético de la región, se encuentra latente en los informes geológicos que se están interpretando en estos meses.
