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China Activa Corredor Bioceánico para Conectar Brasil con Asia

En un movimiento estratégico de gran alcance, China ha dado un nuevo impulso a la construcción de un corredor ferroviario bioceánico que conectará Brasil y Perú, abriendo una ruta comercial directa entre Sudamérica y Asia. Esta ambiciosa iniciativa, largamente contemplada, promete transformar la logística regional y consolidar la influencia china en el continente.

El proyecto, liderado y financiado por empresas chinas, contempla la creación de una extensa red ferroviaria de aproximadamente 5.000 kilómetros que enlazará el puerto brasileño de Santos, en la costa atlántica, con el puerto peruano de Ilo, en el Pacífico. Según informes de la agencia estatal Xinhua, la China Communications Construction Company (CCCC) se encuentra a la vanguardia de esta monumental obra de infraestructura.

La materialización de este corredor bioceánico tendría profundas implicaciones geopolíticas y económicas. Al facilitar un acceso más rápido y económico al mercado asiático para las exportaciones brasileñas, se evitaría la dependencia de rutas marítimas existentes como el Canal de Panamá y las del Atlántico. Además, esta iniciativa acerca significativamente a Sudamérica a la órbita de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, la ambiciosa estrategia global de infraestructura impulsada por Beijing.

Este nuevo corredor logístico podría reconfigurar el panorama comercial sudamericano, generando posibles impactos en la dinámica de puertos tradicionales de exportación como Buenos Aires, Rosario y Valparaíso.

El proyecto cuenta con el firme respaldo de los presidentes de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, y de Perú, Dina Boluarte, quienes han reiterado en encuentros bilaterales su compromiso con el fortalecimiento de los lazos con Asia a través de una infraestructura de transporte más eficiente e integrada.

Si bien aún no se ha anunciado una fecha de inicio para las obras, fuentes en Beijing aseguran que los estudios de factibilidad están progresando de manera constante. La iniciativa subraya la doble estrategia de China de asegurar el suministro de materias primas sudamericanas y de consolidarse como un actor clave en la redefinición de los corredores logísticos globales en el siglo XXI.