Necochea, ciudad balnearia vivió un fin de semana histórico con el recital de La Renga, que convocó a cerca de 40 mil fanáticos.
Sin embargo, más allá del éxito del evento musical, lo que ha sorprendido a todos es la rapidez y eficiencia con la que se llevó a cabo el operativo de limpieza posterior.
Desde la madrugada del domingo, cuadrillas municipales trabajaron incansablemente para dejar la ciudad en perfectas condiciones.
Avenidas principales, peatonales, playas y hasta los campings que alojaron a miles de asistentes fueron completamente higienizados y ordenados.
«Fue un esfuerzo conjunto entre el municipio, la producción del evento y las fuerzas de seguridad», destacó [nombre de autoridad municipal].
«Queríamos demostrar que podemos organizar grandes eventos y al mismo tiempo cuidar nuestro entorno».
La rapidez con la que se recuperó la ciudad tras el recital ha sido destacada por vecinos y turistas, quienes han expresado su satisfacción con la organización y la limpieza.
Además, la producción del show cumplió con su compromiso de retirar todos los vallados instalados en los barrios aledaños, devolviendo la tranquilidad a los residentes.
Un ejemplo a seguir
El operativo de limpieza tras el recital de La Renga se convierte en un ejemplo a seguir para otros eventos masivos.
La coordinación entre los distintos actores involucrados y la eficiencia de las cuadrillas municipales han demostrado que es posible organizar grandes eventos sin dejar una huella negativa en la ciudad.