Los dirigentes del partido de extrema izquierda La Francia Insumisa (LFI) han acusado al presidente Emmanuel Macron de «golpe institucional contra la democracia» por negarse a nombrar a un primer ministro de izquierdas.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, se enfrenta a una renovada presión política ahora que la tregua política que solicitó durante los Juegos Olímpicos de París ha llegado a su fin.
En una columna publicada el domingo, el partido de extrema izquierdaLa Francia Insumisa (LFI) amenazó con emprender acciones legales contra Macron si no nombraba a un primer ministro de la coalición de izquierdas, el Nuevo Frente Popular (NFP), en los próximos días.
«Escribimos esta carta abierta como una advertencia solemne», escribieron los firmantes de la columna, entre los que se encuentra el incendiario líder de LFI, Jean-Luc Mélenchon. El artículo 68 de la Constitución permite al Parlamento francés destituir al presidente por «incumplimiento de sus funciones manifiestamente incompatible con el ejercicio del mandato».
Después de que Macron convocara elecciones parlamentarias anticipadas en julio, ningún partido logró hacerse con la mayoría absoluta de 289 escaños. El NFP, que obtuvo el mayor número de escaños en las elecciones (193), reclama que el futuro primer ministro salga de sus filas.
Tras largas y tensas negociaciones en julio, el CCN aceptó finalmente designar a la funcionaria y economista Lucie Castets como futura primera ministra. Castets es una gran desconocida para el gran público.
Un procedimiento de destitución poco probable
Emmanuel Macron tiene previsto reunirse el viernes con dirigentes de varios partidos políticos para encontrar una solución al actual bloqueo político.
El presidente francés, que tiene la potestad de nombrar al líder del Gobierno, ha aceptado que Lucie Castets esté presente durante las conversaciones, pero la ha descartado para el cargo. El Partido Socialista, que forma parte de la coalición NFP, ha rechazado la amenaza de un procedimiento de destitución.
«Este artículo está firmado únicamente por los dirigentes de La Francia Insumisa. Sólo compromete a su movimiento», declaró Olivier Faure, líder del Partido Socialista, en la plataforma X de las redes sociales.
Además, un ‘impeachment’ requiere el apoyo de dos tercios tanto en la Asamblea Nacional como en el Senado, lo que será difícil de conseguir.
Varios nombres han surgido como posibles candidatos a primer ministro, entre ellos el derechista Michel Barnier, exnegociador del Brexit, el exministro de derechas Xavier Bertrand y Bernard Cazeneuve, ex primer ministro socialista.
Euronews
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