Desde 1973 que el Partido Socialista no apoyaba a un candidato peronista: «Milei representa un riesgo para la democracia», dijo su presidenta Mónica Fein.
Desde el retorno de la democracia que el Partido Socialista se mantuvo en las antípodas del peronismo. La última vez que apoyó al PJ fue en 1973 cuando llamaron a votar por Cámpora y la decisión quebró a los socialistas auténticos de Simón Lázara con la nueva generación que conformó el Partido Socialista Popular. Desde entonces, tuvieron candidatos presidenciales propios.
Ahora, frente al balotaje, en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional, el socialismo decidió el apoyo expreso a la candidatura de Sergio Massa para «defender la democracia y vencer a Milei en las urnas», manifestaron en un comunicado donde sostienen que en el balotaje se discute «democracia frente al autoritarismo».
De esta manera, los socialistas se diferenciaron del radicalismo, socios históricos con los que gobernaron Santa Fe durante 12 años y ahora volverán juntos al poder. Sin embargo, los referentes del PS eligieron romper la neutralidad y apoyar públicamente al candidato de Unión por la Patria.
«Siempre fuimos críticos y opositores al kirchnerismo y su modelo. Venimos de derrotarlo categóricamente en Santa Fe. Pero el autoritarismo que expresa Milei es un límite frente al que no estamos dispuestos a mantenernos prescindentes. La discusión es Democracia frente Autoritarismo», sostuvo la presidenta del partido a nivel nacional, Mónica Fein.
La decisión la tomaron luego de que varios intelectuales y figuras públicas que están lejísimos del kirchnerismo, como Graciela Fernández Meijide o Beatriz Sarlo y que siempre tuvieron simpatía por los socialistas, se expresaron a favor de Massa.
Esta determinación complica aún más al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, y a su sucesor, Martín Llaryora, quienes se fueron de gira oficial a Medio Oriente con el gobernador de Santa Fe, Omar Perotti, y mantienen un silencio cada vez más incómodo.
Es que el socialismo fue uno de los principales aliados de Schiaretti en su aventura presidencial que ahora volcarán su apoyo a Massa y dejan en soledad al mandatario cordobés. De hecho, su compañero de fórmula, Florencio Randazzo, que venía negociando un cargo en un eventual gobierno de Milei, se despegó del candidato de La Libertad Avanza.
Mientras tanto, Natalia de la Sota trabaja intensamente para convencer al PJ cordobés de que se sume a la campaña del candidato del Frente Renovador junto a varios intendentes encabezado por el de Villa María, Martín Gill.
Lo cierto es que la decisión del Partido Socialista puede volverse clave en Santa Fe donde Sergio Massa, después de recibir una paliza en las PASO, obtuvo una remontada histórica en las generales quedando segundo a menos de tres puntos de Milei. Ahora, los votos del socialismo son importantísimos de cara al balotaje en la provincia que es bastión del partido de centroizquierda.
En el socialismo aseguraron que no hubo ningún tipo de contacto con Massa que haya influido en la decisión. Según pudo saber LPO, el candidato a presidente se comunicó a las res de la mañana del domingo de las generales con Mónica Fein para felicitarla por el ingreso de Esteban Paulón a la Cámara de Diputados y de paso, le recordó que no es kirchnerista.