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El análisis del lenguaje corporal se ha convertido en una disciplina cada vez más consultada en los últimos años. Muy utilizada por la psicología forense para analizar los gestos y posturas que manifiestan sospechosos a la hora de ser interrogados, se extendió en los últimos tiempos al mundo de la política para analizar qué dicen los políticos más allá de la palabra.

Es lógico, en la era de los “coach” donde todo está estudiado al detalle, los discursos suelen estar tan preparados y estudiados que dejan poco margen para la interpretación. Por el contrario, por mucha preparación y ensayo que pueda haber, a la hora de expresarse, cualquier persona realiza gestos, movimientos, posturas que, al ojo observador de un especialista, pueden hacer saltar contradicciones entre lo que se dice y cómo se lo dice.

Si hay un político en nuestra ciudad que se caracteriza mucho por lo gestual es el candidato a intendente de JxC Martín Migueles, quien, desde lo discursivo, ha transitado su campaña electoral rumbo a la intendencia de Necochea apoyado en agravios a políticos y periodistas; una práctica que busca redoblar en este tramo final a falta de propuestas y sabiendo que lo acompaña un equipo sin experiencia y que, además, responde a sus armadores radicales.

Luego de perseguir sin tregua a los medios de comunicación que han dado a conocer a la ciudadanía sus desmanejos como administrador mientras estuvo al frente de la Usina y su incapacidad para gestionar, ya sin mucho paño, el abogado ahora busca relacionar al actual jefe de la comuna, el vecinalista Arturo Rojas, con el kirchnerismo, con el solo fin de reabrir la grieta e intentar rascar algunos votos del fondo de la olla subiéndose al montaje teatral de Patricia Bullrich.

Todo esto a través de videos publicados en sus redes sociales donde resaltan la virulencia y agresividad con que se dirige a cámara. Por eso, y para mayor enojo de Migueles, un especialista en expresión no verbal confirmó científicamente que los spots del otrora peronista tienen más de mentira que de verdad.

A través de un informe titulado “Gestos que comunican”, el profesor Jorge Osvaldo Fernández, titular de Oratoria Forense en la Facultad de Derecho de la UCES, confirmó que los videos de Migueles muestran a “un expositor muy tenso”, que da saltitos nerviosos cuando habla y “con una personalidad autoritaria”, basándose en su lenguaje corporal. Veamos qué ve un especialista cuando lo ve a Migueles.

Incongruente y agresivo

Además, de señalar la tensión que se observa en las manifestaciones de Migueles y de definirlo como una personalidad con rasgos claramente autoritarios, el autor del libro “La expresión oral”, caracteriza al candidato de Juntos por el Cambio como un hombre con “un autoritarismo muy particular”, especialmente basado en los gestos, sobre todo, de sus manos que “son impositivos, como pegando hacia abajo”.

“Otro detalle a tener en cuenta es lo que se llama incongruencia gestual, que es cuando niega afirmaciones. Dice algo y lo va negando”, detalla el especialista. En ese marco, el informe se detiene en una acusación que hizo Migueles a la prensa en la que dice “me ensucian todo el tiempo con mentiras”, mientras que el movimiento de su cabeza no acompaña su aseveración. Para que quede claro: Migueles afirma algo, mientras su cabeza adopta una postura de negación.

Son “micro gestos o gestos micromentarios” que utilizan las personas cuando “tienden a pensar otra cosa de la que dicen”, remató el docente que dedicó parte de su trayectoria al estudio de los gestos y movimientos.

Al final, Martín Migueles siempre miente. Antes, cuando atacaba sobre las pruebas, y ahora, buscando alguna escapatoria ante la falta de ideas. Comprobado científicamente, ¿Quién miente Migueles? Una vez más, usted miente.