David Amaglobeli , Ruud de Mooij , Mariano Moszoro
La digitalización, bien hecha, puede equipar a los gobiernos para mejorar la recaudación de ingresos y la eficiencia del gasto.
La digitalización es una fuerza transformadora tan poderosa como la llegada de la imprenta en el siglo XV o la electricidad en el XIX.
Sin embargo, algunos gobiernos han tardado en aprovechar el potencial de la tecnología digital para mejorar la prestación de servicios públicos y fortalecer las finanzas públicas.
Se requiere un enfoque de políticas doble: conectar a Internet a los hogares no conectados y acelerar y fortalecer la adopción de soluciones digitales en el sector público.
Describimos estrategias para implementar estas políticas en una nueva nota de discusión para el personal sobre tecnología gubernamental o govtech.
Fomentar la adopción digital
Los países emergentes y en desarrollo tienen el mayor potencial para dar un salto adelante en su trayectoria de desarrollo mediante la adopción de tecnologías digitales.
Estos países están considerablemente rezagados en materia de conectividad a Internet, un factor clave para la adopción y el uso de tecnologías digitales. A nivel mundial, unos 2.700 millones de personas todavía necesitan estar conectadas.
Dentro de los países, persiste una brecha digital entre edades y géneros. Cerrar esta brecha y beneficiarse de la digitalización requiere una infraestructura digital adecuada.
Nuestras estimaciones muestran que se necesitan 418 mil millones de dólares de inversión en infraestructura digital para conectar a los hogares desconectados.
La mayor parte de estas necesidades de inversión se encuentran en los mercados emergentes y en las economías en desarrollo de bajos ingresos, y las necesidades de estas últimas se estiman en un 3,5 por ciento del PIB.
El apoyo gubernamental puede ser crucial para lograr la conectividad universal al incentivar o invertir directamente en la construcción de infraestructura de Internet, especialmente en regiones donde la rentabilidad sigue siendo desafiante.
Además de la infraestructura, la asequibilidad y la alfabetización digital son cruciales. Los costos de suscripción a Internet siguen siendo altos en los países en desarrollo de bajos ingresos, donde, en relación con los ingresos promedio, el costo promedio es nueve veces lo que gastan los ciudadanos de las economías avanzadas.
Para que el acceso a Internet sea más asequible, los gobiernos pueden considerar ofrecer descuentos o vales en las tarifas de suscripción.
Además, promover programas de alfabetización digital es esencial para superar la renuencia de poblaciones específicas, en particular las personas mayores, a adoptar nuevas tecnologías digitales.
El poder de la govtech
La digitalización permite a los gobiernos aprovechar la tecnología para mejorar la recaudación de ingresos, mejorar la eficiencia del gasto público, fortalecer la transparencia y la rendición de cuentas fiscales y mejorar la educación, la prestación de servicios de salud y los resultados sociales.
Esto se puede lograr mediante mejores procesos de toma de decisiones, la adopción de estándares y prácticas internacionales, la transformación de los procesos y sistemas de gestión de las finanzas públicas y mejores servicios a los contribuyentes y comerciantes para apoyar el cumplimiento voluntario y la facilitación del comercio.
La adopción de govtech en las operaciones fiscales puede fortalecer las finanzas públicas tanto en el lado de los ingresos como en el del gasto.
El análisis del personal técnico del FMI muestra que la presentación electrónica, la facturación electrónica y los dispositivos fiscales electrónicos podrían conducir a un aumento significativo de los ingresos tributarios.
Por ejemplo, la adopción de la facturación electrónica y de dispositivos fiscales electrónicos podría mejorar la movilización de ingresos hasta en un 0,7 por ciento del PIB.
El impacto de la digitalización en la administración de ingresos se ve reforzado al expandir la conectividad digital y garantizar suficiente personal y experiencia entre los funcionarios tributarios.
De manera similar, la automatización de los pagos presupuestarios utilizando tecnologías digitales se asocia con una mayor transparencia presupuestaria. Nuestro análisis sugiere que la digitalización generalmente se asocia con una mejora en la eficiencia del gasto.
La digitalización también puede mejorar la eficacia del gasto social y la calidad de la prestación de servicios públicos.
Las intervenciones digitales, como proporcionar a los estudiantes equipos y software, pueden mejorar los resultados educativos.
En el sector de la salud, la tecnología gubernamental puede ayudar a mejorar la calidad de la atención, aumentar la cobertura de las poblaciones desatendidas y optimizar la utilización de los recursos.
Los registros médicos electrónicos, la telemedicina y las plataformas digitales para la concesión de licencias de patentes, la adquisición de medicamentos y el seguimiento de enfermedades infecciosas son áreas de innovación digital en la atención sanitaria.
La digitalización también puede ayudar a fortalecer las redes de seguridad social mediante una mejor identificación, verificación de elegibilidad y provisión de mecanismos de prestación.
Por ejemplo, integrar la identificación digital y crear datos socioeconómicos extensos puede permitir a los gobiernos identificar mejor y verificar con precisión a los beneficiarios que reciben asistencia social.
Pero estos beneficios de la digitalización sólo pueden materializarse si se hace correctamente. Implementar grandes programas de digitalización es una tarea compleja y requiere una planificación cuidadosa, recursos adecuados, apoyo político y procesos apropiados de gestión del cambio.
La digitalización puede requerir cambios en las regulaciones y los procesos establecidos, dotación de personal y experiencia adecuados entre los funcionarios, y fuertes salvaguardias para la seguridad y privacidad de los datos para proteger la información confidencial.
Sin salvaguardias adecuadas, la implementación de soluciones digitales complejas podría incluso ser contraproducente y facilitar la corrupción.
Al adoptar un enfoque de digitalización en el que las necesidades de los ciudadanos son el foco principal y colaborar estrechamente con las partes interesadas, la govtech puede ayudar a superar estos desafíos y desbloquear todo su potencial para mejorar los servicios públicos para la sociedad.
El FMI está dispuesto a apoyar a los países mediante el desarrollo de capacidades para implementar soluciones de tecnología gubernamental para las finanzas públicas.
FMI