El flamante técnico del «Taladro» dialogó con Télam, se refirió a un nuevo paso en su carrera y sostuvo que cumple un sueño al dirigir al equipo que lo formó como jugador. «Los muchachos están con enormes expectativas e ilusionados», agregó.
Javier Esteban Sanguinetti aseveró que pretende «un juego dinámico y directo para el equipo», al que comenzó a conducir esta mañana vía Zoom para controlar los trabajos individuales, y consideró que está en un «momento óptimo para cumplir un sueño»: el de dirigir a la primera división del club de donde surgió.
«Lo que pretendo es darle mi impronta al equipo, con un estilo dinámico, con un juego más de construcción, más directo, y con un mensaje claro a los jugadores para desarrollar una forma de atacar como para defender», sostuvo Sanguinetti en una entrevista con Télam, tras su primer día de trabajo.
«Lo bueno es que los vi a todos los muchachos con enormes expectativas e ilusionados con el ciclo que iniciamos. En lo particular llego en un momento óptimo por la experiencia acumulada, para cumplir con el sueño de dirigir a Banfield, donde me formé como jugador», prosiguió quien ostenta el récord de haber vestido la camiseta «albiverde» en mayor número de oportunidades: 425 partidos.
El que fuera, también, durante varias temporadas el capitán de la primera del «Taladro», se refirió a la necesidad de volver lo más pronto posible a los trabajos de campo, no solo para poder impulsar su idea de juego, sino fundamentalmente por la salud de los profesionales.
«Se llevan más de 100 días solo con trabajos aeróbicos. Algunos jugadores lo hacen con cintas en la casa o bicicletas fijas, otros que salen a correr, de acuerdo a la provincia donde estén residiendo, pero la incertidumbre y la ansiedad por volver a trabajar en campo los tiene mal», indicó el «Archu».
«Por eso habría que implementar algo para que lo antes posible entrenen con cierta normalidad, ya que deberemos acostumbrarnos a convivir con el coronavirus. Para volver, los futbolistas necesitarán de 45 a 60 días para que tengan nivel de competición y así evitar lesiones, según la fisiología de cada uno», adujo el entrenador de 49 años.
Por otra parte, quien ya cuenta con la experiencia de haber cumplido aceptables campañas dirigiendo a Sol de América y Sportivo Luqueño en la liga paraguaya, abordó la situación en particular de algunos componentes del plantel.
«Hablé con Daniel Osvaldo (ayer renovó su contrato por seis meses), al que noté con la mente puesta en lograr su mejor recuperación. Se quedará al menos hasta fin de año y será un valor importante para el equipo», dijo sobre el ex goleador de Huracán, Boca Juniors, Inter de Milán y la selección italiana.
«Rodrigo Arciero (lateral derecho) y Jonás Gutiérrez (mediocampista) siguen trabajando diferenciado para recuperarse plenamente de sus respectivas operaciones y continuarán con el grupo (el contrato les vencía el 30 de junio), porque el derecho los ampara ya que se lesionaron jugando, así que cuando estén en condiciones serán tenidos en cuenta», aclaró el ex ayudante de campo de Julio Falcioni.
Sobre la posibilidad de sumar refuerzos para cuando se reinicie la actividad, aportó con su criterio lo que necesita y lo que le puede ofrecer Banfield.
«Al tener en cuenta que Mauricio Asenjo (centrodelantero que regresó de Nueva Chicago) puede emigrar y que un par de jugadores podrán ser transferidos, lo que necesitaría serían un atacante, un volante y un zaguero central zurdo», detalló.
«De todos modos sé que me debo adaptar a lo que pueda aportar el club, dentro una situación difícil por la que debe atravesar, como los demás clubes, el país y el mundo, por la crisis económica originada por la pandemia», concluyó Sanguinetti.
El cuerpo técnico que acompañará al nuevo entrenador quedó compuesto por Lucas Rivas, Cristian Lovrincevich y Adrián Manuel González, como ayudantes de campo; Ramiro Loguercio como preparador físico (PF); Walter Occhiato como PF asistente, y Bernardo Leyenda será el entrenador de arqueros.
El plantel que hoy retomó la actividad después de un mes de licencia, quedó compuesto por 30 profesionales, incluidos Asenjo y Martín Payero (Talleres, de Córdoba), que regresaron de sus respectivos préstamos; así como los juveniles Matías González (18 años, volante ofensivo) y Gregorio Tanco (21, defensor).
Sumados a ellos están el zaguero Luciano Lollo y el delantero colombiano Reinaldo Lenis, ambos con sus respectivos permisos para entrenar mientras la dirigencia realiza las gestiones para renovar sus respectivos préstamos.
Los profesionales que se desvincularon al vencer sus contratos fueron Sebastián Dubarbier, Esteban Conde y Renato Civelli (realizó una demanda judicial), mientras que al finalizar sus préstamos, el volante Matías Moya (River) y el centrodelantero uruguayo Junior Arias (Talleres, de Córdoba), más el volante Nery Leyes (Atlético Tucumán), retornaron a sus respectivos clubes.