Este fin de semana, en forma conjunta con personal policial y la DDI, inspectores del área municipal de Comercio y Control Urbano procedieron a la clausura de dos locales, por presentar irregularidades, y un par de fiestas clandestinas en distintos domicilios.
Continuando con los fuertes controles de nocturnidad propuestos por la Subsecretaría de Ordenamiento Urbano y Fiscalización, desde iniciada la gestión del intendente Arturo Rojas, para llevar mayor tranquilidad a los vecinos, este fin de semana inspectores del área de Comercio procedieron a la clausura de dos locales donde se expendían bebidas alcohólicas fuera del horario permitido.
Los negocios intervenidos con el apoyo de personal policial, ubicados en calle 61 entre 68 y 70 y en la esquina de 73 y 52, tampoco contaban con los certificados de habilitación y REBA.
Además, con la participación de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) y Drogas Ilícitas, agentes de Control Urbano clausuraron también dos fiestas clandestinas. En una de ellas, en calle 34 entre 75 y 77, el procedimiento derivó de las denuncias de ruidos molestos realizadas por distintos vecinos, constatándose la presencia de medio centenar de personas en su interior, las cuales habrían sido convocadas a través de distintas redes sociales.
En cuanto a la restante, se procedió a la interrupción de una fiesta electrónica que había sido organizada, sin los permisos correspondientes, en el Club Isabel La Católica, de 75 entre 42 y 44.