Sharing is caring!

Mucho se ha hablado en distintos medios locales y hasta nacionales sobre el trágico desenlace que tuvo la edición de este año de la tradicional carrera de aguas abiertas RIO-MAR.

Se habló de las condiciones adversas del mar, de la idoneidad de los nadadores, de los 50 hospitalizados, de la temperatura del agua, de la falta de medidas de seguridad, de los múltiples abandonos, de los kayaks, de las distintas responsabilidades ya sea del municipio, Prefectura, organizadores.

De lo que nunca se habló fue de la heroica labor realizada por los guardavidas el día de la carrera y que gracias a tan destacada intervención impidieron una tragedia de dimensiones impensadas.

Es que tanto los guardavidas de los puestos escollera, 63, 69, 75 y moto de agua como así también el timonel de la «banana» y los casi 15 guardavidas que ocasionalmente estaban dentro del agua acompañando nadadores efectuaron casi 125 salvatajes.

El número parece exagerado, pero no lo es. La moto de agua sola auxilio a 45 víctimas (entre kayakistas y nadadores); el gomón de la banana 40 más.

De esos 125, 20 fueron rescates de víctimas en estado crítico.

Hay que aclarar que estos guardavidas no recibieron una bonificación especial por parte de la organización privada y que tuvieron que cumplir con el cuidado de los bañistas habituales en su sector, pero además con el agregado de las víctimas propias de la carrera.

En cuanto a los guardavidas que se encontraban mar adentro acompañando a nadadores, estos o bien fueron contratados privadamente por los mismos nadadores o acompañaban por amistad a quien iba compitiendo. Estos guardavidas se vieron envueltos en el dilema de seguir acompañando a sus nadadores o de auxiliar a las decenas de víctimas que los llamaban, se les colgaban a su embarcación o tabla de rescate.

Es decir, en la costa los guardavidas del municipio no daban abasto, y mar adentro los guardavidas voluntarios hacían lo que podían a más de 500mts de la costa.

Las distintas voces nerviosas en la frecuencia del Handy daban cuenta del caos y el desorden generalizado. La moto de agua del municipio yendo de acá para allá, y el gomón de la banana maniobrando entre las olas gigantes también.

Las víctimas pudieron contarse por docenas, pero Una vez más los guardavidas de Necochea Quequén demostraron por qué esta es la playa más segura de Argentina. A cambio de nada pusieron el cuerpo a una situación caótica. Esta entrega es la que debe ser Tenida en cuenta por las autoridades municipales. VALOREMOS NUESTROS GUARDAVIDAS.