En el día de la fecha asistimos a una fuerte suba en el tipo de cambio. Todos sabemos muy bien lo que ello significa para la economía doméstica de cada uno de los hogares.
A fines de marzo de 2016, el gobierno anunció la creación de las Unidades de Valor Adquisitivo (UVA). Dichas unidades ajustan por inflación y su objetivo fue el de facilitar el acceso a la vivienda propia.
La publicidad oficial hablaba de la conveniencia de tomar estos créditos, dado que la inflación iba a tener un sendero descendente y durante 2019, se estabilizaría en torno al 5 % anual. Nada de ello ocurrió. Hoy asistimos a la posibilidad cierta de que la inflación se descontrole.
A tres años y medio de su puesta en práctica, una vez más nos vemos en la obligación de manifestar que estos créditos son absolutamente inviables.
No resulta necesario ser un economista, para advertir que en una economía bimonetaria como la que padece la Argentina, una suba descontrolada en el valor del dólar, implica una explosión de los precios, es decir de la inflación.
Al ser créditos indexados por inflación, toda suba de precios se traduce en una suba en el valor de la cuota y en un crecimiento exponencial del capital adeudado. Nuestros ingresos no acompañan la suba de los precios, y asistimos a un deterioro espeluznante en nuestra calidad de vida.
Desde el Colectivo Hipotecados UVA Autoconvocados, exigimos al gobierno nacional una pronta y urgente atención de nuestra problemática disponiendo un congelamiento en la indexación de nuestros créditos, ya que asistimos a la posibilidad cierta de no poder afrontar el pago de nuestras hipotecas.
Están en juego decenas de miles de hogares. Políticas irresponsables no pueden poner en juego el derecho a conservar nuestras viviendas, dependiendo del “humor de los mercados”.
Frente a lo expuesto, reclamamos: Congelamiento inmediato en la actualización del valor de la UVA, e inmediata sanción de una Ley que ponga fin a los créditos indexados por CER.
#ViviendaSiNegocioNo