El expresidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, alabó este jueves en una población rural boliviana la política económica y social del presidente Evo Morales, en el poder desde 2006 y en busca de un cuarto mandato en las elecciones de octubre próximo.
Según Zapatero, «aquí hay un presidente que ha hecho más que los 77 anteriores por Bolivia: reducir la pobreza extrema, llevar la educación donde no la había, la salud, el agua, la vida, la dignidad, la soberanía».
«Yo os puedo asegurar que no he conocido a ningún presidente que trabaje más horas, que madrugue tanto como Evo Morales», aseguró Zapatero en un discurso radiotelevisado por medios estatales desde Capinota (centro) donde fue inaugurado un sistema de riego.
El exgobernante español llegó al país para ofrecer conferencias especialmente dirigidas a jóvenes.
Morales es un presidente «que ha multiplicado la economía, que ha multiplicado el Producto Interno Bruto, que ha multiplicado la inversión, en todo por 8 o 10 veces; que ha multiplicado la esperanza, la dignidad», sostuvo.
Para este año, Bolivia espera crecer un 4,5%, liderando por sexto año consecutivo el crecimiento en América Latina, según dijo recién el ministro de Economía, Luis Arce.
Según Arce, desde que asumió Morales «el ingreso de los bolivianos se cuadruplicó», al pasar de 9.500 a 40.800 millones de dólares.
A principios de año, Morales destacó que «en 2005 la inversión pública era de 629 millones de dólares» y que para este año se aprobó una inversión de 6.510 millones «que con el (presupuesto) reformulado (generalmente en julio) nuevamente será más de 8.000 millones de dólares».
El mandatario boliviano, que despierta una fuerte oposición a un nuevo período por considerarse inconstitucional, encabeza sin embargo los sondeos a tres meses de los comicios, apuntalado por una firme estabilidad económica y social en los 13 años de gestión.
Cuando llegó al poder, en 2006, Morales comenzó un proceso constante de nacionalizaciones, que inició con la expropiación de los hidrocarburos, en manos desde mediados de los 90 de una docena de compañías extranjeras, como la española Repsol, la brasileña Petrobras y la francesa Total.
Morales agradeció en un discurso posterior la donación a Bolivia bajo el Gobierno de Rodríguez Zapatero de más de 330 ambulancias, que fueron distribuidas a los municipios del país sudamericano.