En otra actitud que muestra la intención camaleónica del empleado provincial de la Defensoría del Pueblo, se desdice sobre temas muy delicados de Necochea.
En el año 2015, pidió que el Casino se demoliera y se creara una plaza seca en su lugar, para luego, en el año 2017 negar la importancia de la sala de juego del Casino de Necochea.
Ahora, quiere hacer creer que se preocupó por su mantenimiento, cuando la resolución de Loterías se logró por los esfuerzos realizados en conjunto por los sindicatos, acompañados fuertemente por el intendente Facundo López y el Diputado Provincial, Roberto Rago.
Para aseverar, lo que expresamos sobre este hábil trabajador público de cargos con buenas remuneraciones, reproducimos una nota del sitio 2262.com.ar de Necochea y parte del diálogo mantenido con la periodísta.
Hay que tener en claro que el juego dejó de ser atractivo como polo de atracción turística, hoy los principales sectores turísticos no tienen nada que ver con el juego.
Y veámoslo recorramos el país y las vacaciones no las planeamos en virtud del juego y de los casinos. O sea que los que digan que la desaparición del juego en Necochea perjudique a la ciudad y al turismo es una falacia y eso es otra discusión.
A mí que se pierda la plaza de juego no me produce ningún escozor ni como plaza turística ni como pueblo de desarrollo, porque es negocio para algunos y es pernicioso para la sociedad.
Dicen que la pérdida de la plaza de juego tiene que ver con la pérdida de importancia de Necochea como punto turístico por no tener Casino.
Yo voy a defender la situación de los trabajadores pero ahora el juego en Necochea, no. Si el juego desaparece habría que solucionar la situación de los puestos de trabajo y las familias que se verían afectadas.
Lo primordial es salvaguardar las fuentes de trabajo. Además, tengo entendido y he escuchado al propio Arturo Rojas que su posición sobre el Casino no es una posición desde Cambiemos sino que es una posición personal. Las discusiones son varias.
Declaraciones al sitio 2262 del 2 de agosto del 2017 realizada por Romina Vélez.