Por Horacio Castelli
Un caso que se ventila este año, tiene repercusión sobre lo sucedido en el año 2013.
Ese año, el Concejo Deliberante de Necochea, decidió la destitución del intendente constitucional Horacio Javier Tellechea.
Las pruebas en las que se basó la Comisión Investigadora, presidida por un concejal inhábil, fueron aportadas por los concejales Esnaola y Diez.
En esa época el periodista Daniel Santoro de Clarín se enteraba de los movimientos en Necochea, antes que el propio Concejo.
Luego de las novedades sobre las mentiras aportadas en los medios y en la justicia por los mismos ediles en el caso Roberto Porcaro, nos deberíamos preguntar: ¿Cuánto mintieron para destituir a Tellechea?
No es un tema menor, el que planteo en este escrito, porque conocí de cerca las maniobras urdidas para echar al intendente.
Por ejemplo, lograron, no se sabe con que argumentos, que la Dra. Andrea Perestiuk renunciara a su cargo de subsecretaria de gobierno y reasumiera su cargo de concejal.
Su presencia, era necesaria para lograr contar con 11 votos para conformar la Comisión Investigadora y posteriormente destituir a Tellechea. Recordemos que Perestiuk había asumido en la misma lista que el intendente.
Esto era importante para los destituyentes porque si se lograba imponer la ley, y la justicia determinaba la inhabilidad del concejal que ejercía como gerente de una empresa concesionaria del municipio, les iba a faltar un voto.
Habría que comenzar a rastrear todas las supuestas «pruebas» que presentaron ante la Comisión.
Incluso, jamás realizaron ninguna denuncia ante la justicia, porque si los fiscales hubieran comenzado a investigar, no iban a encontrar delito alguno.
Dos concejales, que decidieron echar a un intendente votado por la gente, y que contó con el acompañamiento de varios de sus colegas y otros sectores a los que el profesor, les inquietaba y molestaba.
¿CUALES DE TODOS LOS GOLPISTAS TUVIERON FUTURO POLÍTICO?…. fácil de contestar. La historia los ignoro o los dejo en la banquina.