Durante la discusión por el presupuesto 2018, la decisión de María Eugenia Vidal de afectar el 85% del Fondo Educativo a obras de infraestructura en las escuelas generó un fuerte rechazo de los intendentes que finalmente terminaron ganando la batalla.
La pelea no es nueva y fuentes de Cambiemos aseguran que se reeditará este año. Por un lado el gobierno plantea que esos fondos deben ir a casi en su totalidad a reparar los edificios escolares. Por otro, los intendentes quieren poder pagar salarios y otorgar becas.
El año pasado los intendentes impusieron su voluntad y lograron que el porcentaje atado a obras de ese fondo baje del 85 al 50 por ciento para intendentes del Conurbano y al 40% en el caso de los del interior.
Pero este año la situación es más compleja. La explosión en la escuela de Moreno que dejó como saldo dos víctimas fatales desnudaron la verdadera situación de los establecimientos educativos.
La semana pasada, Vidal reconoció que existen en la provincia 12 mil edificios con problemas y dijo que su gobierno está interviniendo apenas en la mitad de ellos. Además, aseguró que decidió enfocar las obras sólo a casos de emergencia como problemas de gas, de electricidad y riesgo de derrumbe.
Un legislador que seguirá de cerca las negociaciones con la oposición dijo a LPO que Vidal insistirá con la misma fórmula. Esto es subir a 85% el porcentaje del fondo destinado a obras. Aunque también sostiene que esta vez podría subirlo a 100%.
El fondo educativo fue creado en 2005 y establece una asignación específica de recursos a las provincias que a su vez coparticipan a los municipios. Los gobiernos provinciales tienen facultades de administrar ese fondo que para este año giró en unos 4.700 millones de pesos.
Por lo pronto, el tema ya empieza a preocupar en agentes peronistas y kirchneristas con responsabilidad territorial. Por caso, en la sesión del jueves en Diputados, el lilito Guillermo Castello deslizó críticas a cómo los intendentes gastan el Fondo Educativo y el kirchnerista Mariano Pinedo (con poder territorial en San Antonio de Areco) salió al cruce reclamando «una descentralización de los recursos».
Más allá del breve cruce legislativo, lo que mostró esa escena es que el tema del Fondo Educativo ya empieza a preocupar en el peronismo y en Unidad Ciudadana de cara a la discusión del presupuesto.
Las posturas parecen irreconciliables, los intendentes hablan de fondos para una educación no formal en clubes y barrios. Desde el oficialismo se contraponen a eso y hablan de un «choreo clientelar que sale muy caro».
Por lo pronto, el jefe de los senadores de Cambiemos en el Senado, Roberto Costa, avanzó con un proyecto para solicitar informes a los 135 distritos y establecer cuánto dinero se recibió en lo que va del año del Fondo Educativo y en qué se invirtió en cada caso.
En paralelo dio ingreso en el senado un proyecto para modificar el artículo que establece los porcentajes que cada municipio debe gastar en obras. De acuerdo a la iniciativa, en las intendencias donde haya problemas puntuales deberá afectarse al 90% en el caso de los distritos del Conurbano y 85 % en el interior.
