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En el marco de la Misión Comercial en la Argentina de una delegación de más de cien empresarios belgas, encabezada por la princesa Astrid de Bélgica, ayer martes 26 de junio, en el Alvear Palace de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, se llevó a cabo una ceremonia, donde se refrendó el contrato de la obra de Profundización a 50 pies entre el Consorcio de Gestión de Puerto Quequén y la empresa belga Jan de Nul N.V.

“Se trata de la rúbrica protocolar del convenio ya firmado el viernes 1° de junio, en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, entre el Consorcio de Gestión y el Gerente para Argentina de la empresa belga Jan de Nul N.V., Bob Michta”, explicó el Presidente del Ente portuario, Dr. Arturo Rojas.

Con la Princesa Astrid acompañada por el Viceprimer Ministro Federal y Ministro de Asuntos Exteriores y Asuntos Europeos, Didier Reynders; Viceprimer Ministro Federal y Ministro de Empleo, Economía y Asuntos del Consumidor a cargo del Comercio Exterior, Kris Peeters; y una amplia delegación Ministros, de periodistas internacionales y empresarios e inversores de su país, la reunión bilateral con la realeza europea posibilitó explicar las oportunidades de potenciales inversiones en la estación marítima.

Profundización a 50 pies

Se realizará la profundización del canal de acceso exterior e interior y del interior del vaso portuario, permitiendo la operación de buques de hasta 46 pies.

Jan de Nul propone realizar la profundización mediante la combinación de dos equipos complementarios: una draga que “rompe” el material duro (per-corte) y otra que luego lo succiona y dispone en el mar.

El Gerente para Argentina de la empresa belga Jan de Nul N.V., Bob Michta, ratificó que “pensamos comenzar la profundización en octubre o noviembre y terminarla en unos cuatro meses. Además, por los próximos siete años garantizamos el calado y la previsibilidad en Puerto Quequén”.

Jan de Nul propone realizar, desde octubre, la profundización mediante la combinación de dos equipos complementarios: una draga que “rompe” el material duro (per-corte) y otra que luego lo succiona y dispone en el mar.

Las dragas para hacer la obra de profundización es la draga cortadora Ibn Battuta, una de las más potentes en el mundo –la tercera en potencia en la flota global de la empresa-; y la draga de succión en marcha Vitus Bering. En este momento, se encuentran trabajando en Latinoamérica, y para finales de este año los trasladaremos hacia Quequén.

Como conclusión, el Gerente de Jan de Nul en Argentina resaltó que “este contrato es la prueba de que hoy se pueden hacer inversiones en Argentina, completamente financiadas por el sector privado”.

Impacto socio-económico

Destacado dentro del eje Competitividad del Plan Estratégico 2016-2026 de la estación marítima, la profundidad a obtener en el canal exterior y el interior portuario será aproximadamente de 15 metros -50 pies-.

La obra más importante de la historia de Puerto Quequén permitirá reducir tiempos, optimizar procesos y minimizar costos, a través de la operatoria de buques de mayor tamaño y el mejor aprovechamiento de bodega.

Implicará una reducción en los costos portuarios en torno al 25 por ciento, al tiempo que producirá una mejora real y concreta de los precios que los productores perciben por sus mercaderías, multiplicando las cargas y generando más y mejor empleo directo e indirecto.

La consecuente expansión y fortalecimiento del Hinterland representará un importante estímulo para que un mayor número de empresas incrementen su participación en el puerto y aumenten la radicación de nuevas inversiones en la zona de influencia.