Protestan en las inmediaciones de la ex Cepan y aseguran que tras el desalojo dictado la semana pasada, los dueños no entregaron las máquinas que les permitía mantener las fuentes laborales.
Los trabajadores de la cooperativa “La Unión” (ex Cepan) se apostaron desde las 10 de la mañana en el local de calle 59 y 52 reclamando la entrega de las máquinas panificadoras como se había acordado antes de retirarse de las instalaciones.
“Estamos manifestándonos en la cooperativa la Unión ya que el viernes tuvimos que soportar la orden de desalojo, lo hicimos pacíficamente con la condición que nos entregaran cinco maquinas que son indispensables para seguir produciendo pan”, aseguró Luciano Cardoni, apoderado legal de la CTEP.
Desde la Municipalidad se habían comprometido a pagar el flete para llevar las máquinas al polo productivo, situación que no fue posible debido al incumplimiento por parte de los dueños de entregar las máquinas.
Cabe recordar que el comercio, antes de cerrar, pertenecía a Bread Shop SA, empresa presidida por Marcelo Despósito y la directora es María Susana Eguren, al momento del conflicto.
Marina una de las trabajadores de la cooperativa la Unión, relata “las herramientas que están adentro, y son nuestras no son ni el 30% del equipamiento. El resto se lo queda Villar. La empresa contratada para el traslado por Diego Lopez es Marchall y cuando vinimos a pedir que nos abran, nos dijeron que no”
Hasta el mediodía Villar no se hizo presente, y su decisión no deja de demostrar la falta de los acuerdos ya firmados. Las trabajadoras indignadas repiten “nosotras no tenemos miedo y no nos vamos hasta que nos den nuestras cosas”
Por su parte, personal policial permanece con la clara orden de reprimir si las trabajadoras quisieran entrar a buscar sus herramientas de trabajo.
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