Por Horacio Castelli
Los números negativos en la administración pública se muestran en rojo. Pues bien, los números de la administración de José Luis Vidal y Graciela Mameluco, son de color bermellón.
El descalabro económico y financiero que provocaron ambos funcionarios tendrá una larga consecuencia en nuestro distrito.
La actual administración del intendente Facundo López, está realizando una exhaustiva auditoría sobre esos números.
Sin embargo, los concejales que fueron parte del gobierno de José Luis Vidal, se mantienen en un absoluto silencio.
Los que pregonaban sus preocupaciones por los destinos de los dineros públicos, nada han dicho ante la realidad que cada vez es más evidente.
¿Donde estuvieron los pedidos de informes de Arturo Rojas, Pablo Aued, Alberto Esnaola y Gonzalo Diez?
Es muy extraño el silencio de estos autodenominados defensores del interés público durante los años en que fueron co-gobierno.
Fueron partícipes principales de la destitución de un intendente y al siguiente no le exigieron las mismas cosas por las que denunciaron al anterior.
Todo muy oscuro, como ha sido siempre el accionar de estos personajes nefastos de la política lugareña.
Mientras tanto, los ciudadanos del distrito deben afrontar los desaguisados de su clase política y las nuevas autoridades afrontar los gastos de partidas que no fueron utilizadas como correspondía.
No hay que ser muy inteligente para darse cuenta que algo estuvo pasando durante los años del gobierno de “La Coalición” con el dinero público.
Los trabajadores nunca estaban seguros cuando iban a cobrar sus sueldos, ahora los primeros días ya cobran y no es noticia.
Las cuentas afectadas estaban vacías y ahora con dineros propios se van cubriendo esas faltantes y realizando las obras que se debían haber concretado.
Las facturas de los proveedores actualmente se pagan a los 15 días de entregadas una vez que se comprueba la entrega de los productos allí mencionados.
Por eso digo, que no es muy difícil saber que algo raro se “cocinó” durante el período de la administración Vidal.
La auditoría del sector económico sigue adelante y todos los días aparecen nuevas sorpresas.
Recordemos que el Concejo Deliberante está para controlar el accionar del Departamento Ejecutivo y supuestamente el Presidente del Bloque de Concejales del Partido Fe es un experto en materia económica.
Durante el corto gobierno de Horacio Tellechea se cansó de exigir que todos los meses le entregaran los números desde economía para conocer lo ejecutado.
Si hubiera tenido la misma exigencia con el gobierno del que fue partícipe se habría dado cuenta lo que estaba sucediendo.
¿O en realidad lo sabía, y junto con sus socios, se hizo el distraído?
La realidad es que hoy nos encontramos con un descalabro económico que solo se puede representar con el color bermellón y con franjas blancas y negras.
