El pedido fue realizado por el fiscal Carlos Rívolo al juez Norberto Oyarbide, por el vuelo en helicóptero que realizó junto al vicepresidente Amado Boudou el día de la inauguración de la temporada en el año 2011.
Se trata del expediente en el que Boudou fue indagado por la realización de dos viajes a la Costa Atlántica bonaerense en diciembre de 2011 para asistir a sendos actos públicos. Rívolo pidió que también sean procesados los responsables de las compañías que proveyeron esos viajes, Nazareno Natale, de la empresa Alas del Fin del Mundo; Marcelo Scaramellini, de Ecodyma.
Los vuelos, dos en total, ocurrieron el 17 de diciembre de 2011 y se realizaron de manera informal, a punto tal que nunca fueron halladas las listas ni los registros de los pasajeros.
No obstante, la investigación permitió establecer que el ex intendente Tellechea también habría tomado parte de esos viajes aéreos.
En principio, Alas del Fin del Mundo proveyó el vuelo pese a que aún no contaba con habilitación para realizar vuelos comerciales. “Los directivos de la empresa Alas del Fin del Mundo estaban impedidos absolutamente de hacer vuelos rentados por la ausencia de los permisos como explotadores de servicios comerciales (taxi aéreo)”, sostuvo Rívolo. El fiscal calificó de “incomprensible” la oferta, a título supuestamente profesional, “a funcionarios públicos de sus servicios”.
El segundo tramo del viaje llegó hasta el Parque Miguel Lillo, en las cercanías de Necochea, y fue concretado en un helicóptero de la firma Ecocyma, ex contratista de obra pública con el Estado.
Oyarbide indagó a mediados de diciembre a Boudou y, con la reanudación de la actividad judicial tras la feria de enero, el expediente quedó en condiciones de resolver la situación procesal de todos los imputados.
“Teniendo en cuenta que fue un viaje institucional y que la invitación de parte de Tellechea a Boudou había sido efectuada con dos meses de antelación resulta incomprensible la no utilización de alguna aeronave de la flota del Estado o al menos, de algún servicio rentado prestado”, apuntó el dictamen del fiscal Rívolo.
Boudou, una semana después de asumir como vicepresidente, se trasladó desde el aeroparque metropolitano Jorge Newbery hasta el aeródromo de Necochea en el Learjet 60, matrícula LV-CRB, de Alas de Fin del Mundo.
Luego, viajó hasta el Parque Miguel Lillo en un helicóptero de la firma Ecodyma, la cual fue contratista de obra pública del Estado.