Por Javier Preciado Patiño
Ya antes de la asunción de Mauricio Macri, la región de Necochea/Quequén era un mar de intrigas en torno a quién presidirá el estratégico puerto agroindustrial de Quequén.
Es que ahí se juegan todas las internas de poder, desde la intendencia de Necochea, que tiene al frente a un hombre del Frente Renovador de Sergio Massa, hasta el poderoso sindicalista y líder de los trabajadores rurales, Momo Venegas, pasando por las organizaciones ruralistas y el agro negocio.
En las últimas semanas comenzó a circular con fuerza la posibilidad de que el abogado Martín Caraffo fuera el elegido por la gobernadora Vidal para encabezar el consorcio de gestión del puerto, lo que generó cantidad de resistencias.
“No sabemos si es una auto postulación o realmente el hombre que Venegas quiere imponer, pero en cualquiera de los casos es una persona muy resistida”, sostienen en el mundo de la cadena agroalimentaria local.
Caraffo ya había sido presidente del consorcio en la gestión de Daniel Scioli y su salida vino acompañada de una auditoría muy dura para con su gestión, que la continuó Mario Goicoechea, quien también se presentó para la intendencia de Necochea por el Frente para la Victoria, contienda en la que obtuvo el tercer lugar después de Facundo López (FR) y Pablo Aued (Cambiemos).
“A López le gustaría ser el que imponga el administrador”, señalan las fuentes locales. “Pero el Momo acá es muy poderoso; lo que pasa que concederle la gestión del puerto sería darle demasiado poder”, agregan, respecto del sindicalista aliado del PRO.
Pero en la interna también talla el presidente de Coninagro, Egidio Mailland, que es de la zona y que de hecho es director del consorcio del puerto en representación de los productores. Para completar el complejo internismo en torno a la gestión del puerto se señala que el electo diputado provincial por Cambiemos y alto dirigente de la UTA en la ciudad costera, Martín Domínguez Yelpo, también quiere tallar en la designación del presidente del puerto.
“Lo que no debería suceder es que finalmente “Cambiemos” opte por un funcionario que ya estuvo en la gestión de Scioli”, opinan las fuentes. De todos modos, la situación podría quedar en stand by, con el puerto gestionado por funcionarios de línea, hasta que se defina políticamente la conducción.