Por Horacio Castelli
Ayer fue una jornada particular en este camino a las PASO del 9 de agosto en Necochea, con la publicación en varios medios (en este también), de fotografías enviadas por ciudadanos a las distintas redacciones donde se podía visualizar a trabajadores de la UPC excavando un pozo en las bases de los carteles de publicidad proselitista de Pablo Aued.
Luego, fueron varios los comentarios e intentos de desmentidas que se produjeron a lo largo del día, cuando en realidad los vecinos espectadores de la actividad vieron como se accionaba en el cartel de propaganda.
A partir de esta información, comenzaron las distintas opiniones de varios comunicadores sociales, tratando de dar una especie de cátedra periodística sobre como se debe manejar una información.
La realidad que la situación planteada no ameritaba una investigación profunda ya que reflejaba lo que los ciudadanos perciben y esto va más allá de lo que se pueda investigar.
La ciudadanía de Necochea hace rato que no les cree a varios dirigentes por más explicaciones que den, y esto no lo puede remediar un periodista o varios medios, es la realidad.
Por otra parte, los periodistas tenemos el derecho, y diría, la obligación de recabar la información de las personas que nos merecen confianza.
La verdad, que en lo personal, a las autoridades de la Usina Popular Cooperativa “Sebastián de María” actuales, no les creo absolutamente nada.
Han mentido descaradamente cada vez que se informa sobre hechos de irregularidad detectados.
Uno de estos temas fue la venta de varios inmuebles que pertenecían a la Usina y que produjo una fuerte descapitalización.
Las autoridades informaron en varias entrevistas periodísticas que esta venta se había decidido para lograr el dinero necesario para invertir en el triple play, cuando en realidad (y consta en actas judiciales que hemos publicado), es para pagar un juicio perdido y que la entidad debe abonar por un monto superior a los 14 millones de pesos.
Estas mentiras, y otras más que han sumado a lo largo del tiempo, hacen que la ciudadanía y algunos periodistas no les creamos.
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Lo bueno es que el presidente de la cooperativa, Antonio Vilches, dice que no tienen personal para la toma de los medidores y así castiga a los usuarios en sus cobros, pero silo tiene para colocar los postes de un candidato, y después dicen que es un perseguido por razones políticas. No se puede ser tan incoherente y crápula
Hola mi nombre es Marcelo Cascino, y soy empleado de la UPCdesde hace 10 añosy quiero expresarme en este medio ya que veo que se esta informando a la poblacion con mentiras, digo esto porque uno de los operarios que esta en la foto soy yo ya que junto a una cuadrilla concurrimos al lugar ya que existia un reclamo que hacia variosdias toda la rotonda del puente colgante estaba totalmente a oscura, lo que ud publica como que se estaba poniendo un cartel del partido Fe es totalmente falso ya lo que se estaba haciendo es reparar el cable sub terraneo que alimenta las columnas de alumbrado y que habia sido dañado por la colocacion de carteleria politica. Creo que esuna falta de respeto haber publicado una fotografia de tres personas que nada tienen que ver con ningun partido politico ensuciando la imagen de quienes solo estaban cumpliendo con su trabajo que es brindar un buen servicio a la ciudadania. Espero con esto aclarar cual fue la situacion y desear que las chicanas politicas de algunos no perjudiquen la imagen de quienes solo nos intereza ser utiles a la sociedad
Las chicanas políticas las proporcionan los que conducen de mala manera las instituciones. Que para gran parte de la ciudadanía no fuera extraño que la UPC estuviera realizando tareas proselitistas marca la desconfianza que tienen sobre quienes manejan las instituciones. No se culpa a los trabajadores, si a los dirigentes de la entidad. Si es como Ud. dice, queda publicada la explicación. Lamentablemente Señor Cascino, tengo que decirle que nosotros no hemos mentido, ya que si usted lee bien el artículo en ningún momento hablamos de colocación de carteles como hecho real sino que «están trabajando en un cartel de propagando política», lo que interpretan quienes ven esas imágenes ya no corre por cuenta de este sitio. Por algo será que los habitantes piensen mal de la conducción de la UPC. No se ensucia la la imagen de nadie. Cada uno saca sus conclusiones.
Y después Antonio Vilches, presidente de la cooperativa tiene el tupé de decir que son perseguidos políticos??? No tienen vergüenza. Utilizan los vehículos y el personal que pagan todos los vecinos para trabajar en la campaña de un partido político, y después cobran lo que quieren aduciendo que no tienen gente para hacer las mediciones de los medidores. SON UNOS CORRUPTOS