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El senador nacional Fernando Solanas presentará un proyecto de reforma a la Ley Federal de Pesca. La iniciativa fue elaborada junto al doctor César Lerena. Entre otras cosas se busca impedir que las cuotas de captura puedan transferirse entre privados para evitar la concentración.

Convertir en intransferibles a las cuotas de captura, crear mercados concentradores en todos los puertos del país, jerarquizar la investigación científica, promover el consumo interno y endurecer las sanciones frente a las prácticas depredatorias son algunos de los ejes de un proyecto impulsado por el senador Fernando «Pino» Solanas para modificar el contenido de la Ley Federal de Pesca, vigente desde hace casi 20 años.

La propuesta será presentada en el Congreso de la Nación, junto al doctor César Augusto Lerena, coautor del proyecto y del libro «Pesca, Apropiación y Depredación. Bases para una Política Nacional» en el cual se condensan los principales cambios que el senador planea instrumentar en la legislación pesquera nacional.

Según le explicó Lerena, el trabajo será presentado en el Salón Azul del Senado de la Nación, en un acto destinado a promover el proceso de reforma de la Ley Federal de Pesca. La propuesta también será expuesta en otras localidades del país, en especial en Mar del Plata, donde entre el próximo 28 y 29 de agosto el legislador tiene previsto mantener reuniones con cámaras empresariales, dirigentes sindicales y otras instituciones ligadas a la industria.

La iniciativa parte de una mirada crítica con respecto a la legislación actualmente vigente y plantea reformular buena parte de su contenido, revirtiendo algunas disposiciones centrales, como las Cuotas Individuales y Transferibles de Pesca (CITP) que poseen las embarcaciones nacionales que operan en el Mar Argentino.

Según el proyecto, las cuotas deberían ser convertidas en «intransferibles» para evitar así su transacción entre privados. «El Estado debe retomar la administración plena para dar más acceso al recurso a todos los operadores de la actividad y asegurar el interés de las provincias; promoviendo el proceso industrial creciente en plantas en tierra, para aumentar la mano de obra ocupada argentina», se plantea en la propuesta, dentro de la cual también se propone generar «reservas para la pesca costera, artesanal y para proyectos de radicación estratégica».

El proyecto también contempla medidas para garantizar la sustentabilidad de los recursos «a perpetuidad» mediante la aplicación de estrictas sanciones para quienes «depreden o contaminen». Otro de los planteos consiste en la creación de mercados concentradores en todos los puertos del país para «transparentar la comercialización» y para «mejorar la competitividad y la rentabilidad de los productos pesqueros argentinos, otorgándoles una mayor participación a las pymes en el comercio exterior». Por otro lado, el texto también apunta a generar condiciones que incentiven el consumo interno de pescado.

Además contiene una serie de propuestas para fomentar la investigación y el desarrollo tecnológico, declarando como un organismo autónomo y autárquico al Instituto de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep). Otro punto central del proyecto, promueve la ocupación y control del Atlántico Sudoccidental y el Océano Antártico, promoviendo la pesca mediante buques de bandera nacional y acuerdos de investigación y comercialización con los países del Mercosur.

Para ello, se proponen distintas medidas que garanticen un «control cierto» de las aguas nacionales y que le permitan a la flota argentina competir contra los buques de bandera extranjera actualmente capturan a razón de 1 millón de toneladas anuales de calamar en las inmediaciones de la Zona Económica Exclusiva.

Para graficar la importancia de esta decisión, los autores del proyecto referenciaron que mientras buques foráneos pescan semejante volumen de materia prima, la flota nacional apenas captura en promedio unas 800 mil toneladas por año de la misma especie. (La Capital – Mar del Plata)