La presidenta Cristina Fernández de Kirchner anunció ayer el envío de un proyecto de Ley para la Promoción del Trabajo Registrado y Prevención de fraude laboral que apunta a regularizar la situación de 300.000 personas empleadas en condiciones precarias en el término de un año.
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Cristina anunció el envío de un proyecto de ley al Congreso para combatir la precarización laboral y promover el trabajo registrado, con el cual se espera «formalizar a 650.000 trabajadores en dos años».
Cristina, en un acto en Casa de Gobierno, dijo que el proyecto de ley de «Promoción del Empleo Registrado y Prevención de Fraude Laboral», que «esperamos que sea aprobado», está llamado a atacar lo que a su entender constituye el «segundo problema que tienen los trabajadores», en referencia al empleo no registrado.
Tras hacer el anuncio, Cristina consideró que el primer problema para un trabajador «el más grave, es no tener trabajo, ése es el principal problema que los argentinos tuvimos hasta el 2003, donde casi un tercio de la población estaba desocupada».
Cristina explicó que mediante este proyecto, que ya fue enviado al Congreso, 290.000 microempleadores resultarán beneficiados y en principio se destinarán 4.150 millones de pesos en beneficios para los empleadores y, de ese monto, «el 65 por ciento» estará dirigido a las «micro empresas» para «facilitar la registración» de trabajadores.
La jefa de Estado señaló además que las empresas con menos de 15 empleados recibirán un descuento del 100 por ciento en el pago de aportes patronales por cada empleo que generen en el término de un año.
«Vamos a redireccionar los subsidios que alientan la creación de empleo registrado en favor de las pequeñas y medianas empresas», añadió.
La mandataria aseguró que la iniciativa contempla que los descuentos patronales se extiendan por un segundo año con un 75 por ciento de descuento.
En esa línea, la Presidenta aseguró que «cuando un empleador ha violado las normas y tiene empleo en negro va a perder todos los beneficios que recibe del Estado».
«Esto no es ninguna amenaza -aclaró la jefa de Estado-, es simplemente cuidar los recursos de todos los trabajadores».
Señaló que «esta tiene que ser una tarea en la que ayuden mucho los sindicatos» y agregó «es bueno que nunca, nunca, nunca nos olvidemos de los que tienen precarizado su trabajo y todavía no consiguieron trabajo, sobre todo porque el trabajo no se ha caracterizado por ser permanente sino que tiene volatilidad».
Por eso, sostuvo que «les pedimos a todos los dirigentes sindicales, a todos los sindicatos, que sigan trabajando muy fuertemente por conseguir que se mantengan los trabajos y por reducir la precarizacón laboral, porque es fundamental para poder seguir avanzando».
Además, Cristina analizó que «la precarización del trabajo crea un disciplinamiento, porque se acepta cualquier salario».
«Cuando uno necesita trabajo y ve una inmensa fila de gente para buscar un lugar, acepta cualquier condición y salario», aseveró la jefa de Estado.
En esa línea, recordó que «al tema lo hemos abordado desde el 2003 creando más de seis millones de puestos de trabajo que nos han llevado precisamente a lograr el último trimestre del año pasado el índice de desocupación más bajo, que fue del 6,4 por ciento».
«Llama muchas veces la atención cuando uno no escucha, como uno de los principales reclamos, que se mantenga el nivel de ocupación como la gran garantía por los derechos de los trabajadores, y en segundo término que se luche contra la precarización laboral, que realmente es un enemigo de todos los trabajadores», señaló.
Al respecto, Cristina recordó que el Gobierno recibió «a la Argentina con un 49,6 por ciento de gente que no estaba registrada en su trabajo y hoy hay un descenso de 22 puntos porcentuales».
«Estamos en un 33,5 por ciento de trabajadores informales -explicó-, o sea, un tercio de los trabajadores está precarizado y ésta es la gran lucha que tenemos que dar».
«Nos comprometimos con empresarios y sindicalistas en agosto del año pasado, en Río Gallegos, y obviamente ahora enviamos el proyecto», destacó la mandataria.
La jefa de Estado estuvo acompañada, en el salón de los Patriotas Latinoamericanos, por el vicepresidente Amado Boudou; el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; el ministro de Economía, Axel Kicillof; de Industria, Débora Giorgi; y de Trabajo, Carlos Tomada.
Antes del anuncio, dejó inaugurado el Salón de los Pueblos Originarios en Casa de Gobierno y mantuvo tres videoconferencias.