Lo aseguró la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en Universidad Nacional de La Plata y agregó: “En 2003 recibimos un país en llamas y no nos pusimos a llorar, sino que nos arremangamos y nos hicimos cargo».
Cristina dejó oficialmente inauguradas las sedes de las facultades de Psicología, Ciencias de la Educación y Humanidades de la Universidad Nacional de la UNLP
«En 2003 recibimos un país en llamas, endeudado, con las arcas vacías, un 25 por ciento de desempleo, sin fábricas, con gente embargada, sin esperanzas, sin ilusiones, y no nos pusimos a llorar, sino que simplemente nos arremangamos y nos pusimos a trabajar», subrayó.
Cristina lo expresó en un acto que encabezó esta tarde en su ciudad natal, La Plata, donde dejó oficialmente inauguradas las sedes de las facultades de Psicología, Ciencias de la Educación y Humanidades de la Universidad Nacional local.
La Presidenta encabezó el acto acompañada por el gobernador Daniel Scioli y el diputado nacional Juan Cabandié.
En la misma ceremonia la Universidad le otorgó a Cristina el título de Doctor Honoris Causa e igual distinción post mortem se le confirió al ex presidente Néstor Kirchner.
En ese marco, la jefa de Estado dijo que los argentinos «aprendimos que la democracia es imprescindible para desarrollar los valores de inclusión, de justicia social y de una patria diferente».
«Los que hemos abrazado las causas políticas, lo mejor que podemos ofrecer son las realizaciones», señaló Cristina al referirse a las nuevas sedes inauguradas.
Cristina resaltó además la figura del diputado nacional Juan Cabandié y recordó el lazo afectivo que lo unía al ex mandatario Néstor Kirchner, por lo que recibió en su nombre el título de Doctor Honoris Causa post mortem de la Universidad de La Plata.
La Presidenta contó que su hijo, Máximo Kirchner, le sugirió que fuera Cabandié quien recibiera hoy el diploma, con el argumento de que Néstor, ya no es únicamente su padre, sino el de «millones de argentinos».
«Los que hemos abrazado las causas políticas, lo mejor que podemos ofrecer son las realizaciones» Visiblemente emocionada, Cristina celebró que Cabandié, hijo de desaparecidos, llevara puesta una corbata celeste que le regaló Néstor Kirchner y detalló momentos compartidos con el diputado nacional, desde que lo conoció en el acto en la ex Esma, en la ciudad de Buenos Aires, el 24 de marzo del 2004.
La Presidenta, al recibir el Doctorado Honoris Causa, afirmó que es un honor que «lo reciben todos los que pasaron por las aulas y, sobre todo, los que no están porque no los dejaron terminar sus carreras».
Asimismo, Cristina recibió también el premio `Rodolfo Walsh` de la Facultad de Periodismo de la UNLP, que también les fue otorgado años atrás al presidente de Bolivia, Evo Morales; al de Ecuador, Rafael Correa, y al ex mandatario venezolano, Hugo Chávez.
En ese sentido, Cristina rindió homenaje a todas las víctimas de la dictadura militar de Berisso, Ensenada y La Plata.
Cristina manifestó estar «llena de orgullo», porque su Gobierno ya destinó algo más de mil millones de pesos para obras en todas las universidades nacionales del país.
Detalló además que, en el caso de la Universidad Nacional de La Plata, su administración aportó 300 millones de pesos para obras.
Acompañaron a la Presidenta, además de Scioli y Cabandié, la titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini; la presidenta de Abuelas, Estela de Carlotto; el presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez; y el secretario de Derechos Humanos, Martín Fresneda.
Además estuvieron presentes los ministros de Planificación Federal, Julio De Vido; de Industria, Débora Giorgi, de Salud, Juan Manzur; y de Educación, Alberto Sileoni; así como el secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli; y el de Legal y Técnica, Carlos Zannini.
Entre los presentes estuvieron también el diputado nacional Andrés Larroque y el ex senador radical Leopoldo Moreau.