El Ministerio de Salud de la Nación, mediante una resolución, estableció 90 días de plazo para que se adecuen a la Ley de Farmacias de la Nación. La Confederación Farmacéutica Argentina expresó su beneplácito por la decisión.
En tres meses, las cadenas farmacéuticas no podrán vender productos alimenticios ni de kiosco, entre otros. Así lo determina la Resolución Nº 1632 del Ministerio de Salud de la Nación publicada ayer en el Boletín Oficial, que reglamenta la Ley de Farmacia de la Nación (26.567) sancionada en 2009.
La norma precisa que las farmacias sólo podrán dedicarse a la venta de recetas preparadas, dispensa de drogas, medicamentos, incluidos los de venta libre y especialidad farmacéutica cualquiera sea su condición de expendio, además de los productos destinados a la higiene o estética de las personas y productos para diagnósticos.
La resolución establece también que «la venta y despacho en farmacias de los productos no incorporados» a la ley serán considerados ejercicio ilegal de la farmacia, y sin perjuicio de las sanciones establecidas por la ley, los que la efectúen podrán ser denunciados por infracción al Código Penal».
La Ley 26.567 establece el permiso exclusivo de venta de medicamentos de «venta libre» en las farmacias que deberán ser dispensados personalmente en el mostrador por farmacéuticos o personas autorizadas para el expendio, y prohíbe la venta de medicamentos en kioscos y supermercados. En la Ciudad de Buenos Aires esa ley fue aprobada por la Legislatura en noviembre de 2011, pero días después fue vetada por el Ejecutivo porteño.
Si bien la ley causó el descontento de los kiosqueros, la modificación de la reglamentación dada a conocer ayer, los beneficia. «Las farmacias polirubro nos están dañando muchísimo», aseguró Carlos Renna, presidente de la Unión de Kiosqueros de República Argentina (UKRA) «Venden hasta sandwiches de miga y a los kiosqueros los destroza, por eso estamos de acuerdo con la reglamentación. Para poner un cartel en la calle nos piden 142 trámites, y en esas farmacias venden de todo y todo junto; no existe la lealtad comercial», agregó Renna en diálogo con Tiempo Argentino.
La resolución otorga un plazo de 90 días para la adecuación de los locales y deja fuera del circuito farmacéutico a las cadenas que además de medicamentos, comercializan productos alimenticios, de kioscos, y otros enseres. La más afectada es Farmacity que con más de 400 locales ya concentra el 30% del mercado farmacéutico. Fuentes de la empresa señalaron a Tiempo que están analizando la medida y destacaron que “esta resolución tiene un interés comercial y no tiene nada que ver con la salud”.
Carlos Damin, jefe de la División Toxicología del Hospital Fernández destacó que «los medicamentos de venta libre son la segunda causa de intoxicación por frecuencia en un hospital general de agudos, siendo la primera la intoxicación por bebidas alcohólicas». Por su parte, Ricardo Aizcorbe, presidente de la Confederación Farmacéutica Argentina, manifestó que «la regulación de las farmacias indica un paso acertado para lograr un modelo sanitario de farmacia, y no de shopping», y añadió que a «nivel mundial estos modelos tipo Farmacity ya no funcionan, sino que se buscan farmacias con servicios controlados y que hagan uso racional de los medicamentos», dijo el experto, y agregó que «los remedios que no cuentan con la supervisión de profesionales farmacéuticos no cuentan con el debido control, entonces suelen venderse productos fraccionados y el comprador no sabe el origen del mismo. Recordemos que en nuestro país, el abuso de los medicamentos de venta libre provoca 700 muertes al año».